Pinta mal el futuro para México, ya que el crecimiento económico para 2022 bajó a 1.8 por ciento, mientras los cálculos de la inflación siguen a la alza y ya van por el 5.8 por ciento anual.
Con esos datos se puede prever que las cosas pintan mal para el país en materia económica en lo que resta del año e incluso para el 2023.
Ante la baja en el crecimiento y la alza en la inflación, la previsión es que el Banco de México subirá la tasa de referencia hasta el 8 por ciento para tratar de controlar la espiral inflacionaria.
Además, justo cuando debiera ser el momento de la recuperación económica después del parón por la pandemia de Covid-19, los altos precios internacionales de los combustibles y la incertidumbre provocada por la reforma energética que se discute en el Congreso pintan un panorama de escasez de hidrocarburos y apagones eléctricos.
Sin embargo, lo más preocupante es que, a pesar de esos indicadores y de las previsiones de los analistas, nada más no se ve que la Secretaría de Hacienda, a cargo de Rogelio Ramírez de la O, tenga un plan de contingencia.
No cabe duda que pinta mal el futuro para México, ya que el crecimiento económico para 2022 bajó a 1.8 por ciento, mientras los cálculos de la inflación siguen a la alza.
Con información de Reforma
JZ