Entre gritos y abucheos contra el alcalde Roberto Villalpando Arias y el gobernador, Adán Agusto López, en Tabasco y ambos de Morena, el presidente Andrés Manuel López Obrador enfureció contra los pobladores y dijo que “a la autoridad se le debe de respetar”.
AMLO exhortó a la población a dejar a un lado la politiquería, la grilla y mandar al carajo a los ambiciosos y corruptos. Aseguró que antes el gobierno no estaba hecho para servir ni beneficiar al pueblo, porque el gobierno era un comité al servicio de una minoría.
“Estaba hecho para el saqueo, para robar, así estaba estructurado el gobierno, ahora estamos cambiando para que el gobierno esté realmente al servicio del pueblo y con el pueblo y esto no crean que es fácil, no son tamalitos de chipilín”, dijo.
Al respecto, vale la pena recodar cuando el presidente aseguró que gobernar a un país “no tiene mucha ciencia”, pues según el tabasqueño, la política no se basa en conocimientos específicos sino en transformar y hacer historia, es servir a los demás, sólo eso.
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“Eso de que la política es el arte y la ciencia de gobernar no es tan apegado a la realidad; la política tiene que ver más con el sentido común, que es el menos común, eso sí, de los sentidos”, indicó.
Después de un año y tres meses que ha estado como presidente, AMLO solo se ha dedicado a empeorar los números y ha puesto en crisis la economía e inseguridad de México. Sin embargo, para él, todo es culpa de gobierno anteriores y del neoliberalismo.
Estamos cambiando, pero pues "no es fácil, no crean que son tamalitos de chipilin"
Pues no decías que gobernar no tiene ciencia? 🙂🍭 pic.twitter.com/H28gscfQPB
— Greñitas (@ChayraIrma1) March 1, 2020
