De acuerdo con varias organizaciones nacionales e internacionales, desde que la pandemia por COVID-19 arribó a México se han registrado 44 ataques en contra periodistas; en consecuencia le exigieron al gobierno de Andrés Manuel López Obrador que garantice el derecho a la vida, salud, seguridad y protección de comunicadores y defensores de derechos humanos.
En ese sentido, Jorge Ruiz del Ángel, director general adjunto de Reacción Rápida y Recepción de Casos del Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, detalló que “la violencia generalizada en algunas zonas de este país lamentablemente no paró hacia el gremio periodístico.
Pero en lo que va de 2020 el panorama para comunicadores y defensores no ha sido nada agradable, pues según Ruiz del Ángel, en dicho lapso, se han contabilizado 193 agresiones.
Por otro lado, Edison Lanza, relator especial para la Libertad de Expresión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), afirmó que la emergencia sanitaria no debe afectar los derechos fundamentales, como la libertad de expresión, el acceso a la información, a la salud y a la vida.
Mientras que Francisco Javier Acuña Llamas, comisionado presidente del Inai, lamentó que la crisis sanitaria se use como ‘mordaza’ o ‘cubrebocas’ para el periodismo; pues ninguna información se debe tomar como buena o mala para el gobierno, como el sesgo en los datos que a diario se presentan sobre el avance del coronavirus en México.
Para Fréderic Vacheron Oriol se debe terminar la impunidad en los ataques contra los medios libres, valientes y con compromiso social; al tiempo, que calificó como preocupante la “ola de despidos de trabajadores de medios de comunicación”, así como los contagios y fallecimientos de reporteros por esta nueva cepa.
“Es obligación del Estado garantizar la seguridad de sus ciudadanos y hacer un esfuerzo adicional con aquellos que por su labor social incurren en riesgos adicionales”, comentó el especialista.
Por su parte, Inés Sáenz, , vicepresidenta de Inclusión, Impacto Social y Sustentabilidad del Tec de Monterrey, acotó que la salud del periodismo es crítica, y no solo por el COVID-19, pues en las redacciones se han generado brotes de desinformación que se propagan; por lo que es necesario “fortalecer una prensa libre e independiente” en pro de la democracia.
“Los retos están a la vista y cruzan todo el tejido del periodismo (…) las muestras de una necesaria protección a la libertad de expresión y el derecho a la información son palpables, pues a pesar de la crisis sanitaria la violencia sigue allí”, aseveró Sáenz.
Con información de El Sol de México
