En otras ocasiones hemos cuestionado con severidad la promoción excesiva de Andrés Manuel López Obrador y Ricardo Anaya –presidentes de Morena y del PAN, respectivamente–, a través de los spots de sus partidos.
Aquí hemos dicho que los señores Andrés Manuel y Ricardo abusan de los recursos partidistas y emplean recursos de las arcas públicas para consolidar un proyecto político personal: la candidatura presidencial.
Sin embargo, todo indica que Obrador y Anaya no son los únicos políticos afectos a este tipo de prácticas.
De acuerdo con el periódico Reforma, el gobierno del poblano Rafael Moreno Valle gastó 20.7 millones de pesos en la promoción de su Quinto Informe de Gobierno. Es decir, 3.1 millones de pesos más que el año pasado.
En espectaculares, el gobierno de Puebla gastó 5.7 millones de pesos.
En televisión se fueron 2.7 millones de pesos.
En Internet se invirtieron 1.7 millones.
En cines también se pautaron 1.7 millones de pesos.
En parabuses se utilizó un millón 44 mil pesos.
Además, en medios agrupados como “otros” se destinaron 7.6 millones.
Y aunque los 20.7 millones de pesos gastados suenan escandalosos; no es el informe más caro de Moreno Valle.
En su primer ejercicio de rendición de cuentas gastó 42.1 millones de pesos. Mientras que en el tercero destinó 25.8 millones a publicidad.
Es decir, que en sus cinco informes de gobierno, Rafael Moreno Valle ha gastado 127.1 millones de pesos.
¿Cómo debemos entender que un gobernador –y dos líderes partidistas–, difundan su rostro, su nombre y su imagen con el dinero de todos los mexicanos? ¿qué significa que Rafael Moreno Valle gaste más de 100 millones de pesos en difundir su informe de gobierno? ¿será, acaso, que nadie en su partido –o en su gobierno– cuestiona este despilfarro? ¿será que a nadie importa que el dinero de todos se utilice de esta manera? ¿acaso a nadie le importa?
