Morena repartió legisladores a sus aliados para controlar el Congreso capitalino

Morena aprovechó su amplia mayoría en el Congreso de la Ciudad de México para “mover sus fichas” y quedarse artificialmente con la presidencia de la Mesa Directiva, así como permitir que sus aliados alcanzaran a formar bancada.

Durante el fin de semana, el partido de Andrés Manuel López Obrador cedió dos legisladores al PT, que además sumó a su bancada a la priista Leonor Gómez Otegui. De ese modo el Partido del Trabajo se convirtió en la tercera fuerza en el Congreso local.

Los morenistas que se pasaron al PT fueron Lilia María Sarmiento y Jesús Martín del Campo. Casualmente, éste último fue designado presidente de la Mesa Directiva del Congreso, de modo que aunque nominalmente la presidencia la ostentará el PT, su control estará en manos de un morenista, quien además fue tesorero del gobierno capitalino en la administración de Andrés Manuel López Obrador.

De este modo, Morena podría imponer a la líder de su bancada, Ernestina Godoy, como presidenta de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), y librar la restricción que impide que una misma fuerza política ostente a la vez la presidencia de la Jucopo y de la Mesa Directiva.

Pero eso no es todo. Además, Morena cedió al diputado Fernando Aboitis, quien pasó a integrarse a Encuentro Social. De ese modo, el PES tendrá a los legisladores suficientes para formar bancada.

Así, los partidos que conformaron la coalición Juntos Haremos Historia (Morena, PT y PES) acapararán 42 de los 66 escaños del Primer Congreso de la Ciudad de México, y presidirán tanto la Mesa Directiva como la Junta de Coordinación Política.