Luis Enrique Granados/Bedolla, gobernador de Michoacán, anunció este martes que “dejará atrás” el combate al crimen organizado en su estado, pues lo calificó como “estéril”.
El mandatario estatal morenista justificó esta decisión al explicar que centrará su atención en resolver otros problemas más importantes, como la marginación que viven cientos de michoacano.
“Hemos dejado atrás la idea de continuar una guerra que durante décadas no ha sido más que agravar la situación de violencia; hoy nos encaminamos en una visión ampliada de la seguridad ciudadana, porque estamos trabajando para atender las causas, como son la pobreza, la marginación; vamos a trabajar con los medios posibles para alcanzar la paz”, declaró.
Michoacán en un punto estratégico para los cárteles de droga que buscan conquistar la venta y distribución de diferentes sustancias ilegales para continuar expandiendo su imperio.
Te puede interesar | Sí hubo denuncias sobre daños en el tramo de la Línea 12; Sheinbaum las ignoró
Debido a ello, los índices de criminalidad, homicidios y violencia han subido; para contrarrestarlo la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) ha enviado a más de 700 militares a distintos municipios como Zitácuaro, Zamora, Morelia, Uruapan.
Este es un claro ejemplo de cómo la 4T prefiere tener como aliados a los criminales en vez de combatirlos.
No hay que olvidar que Andrés Manuel López Obrador prometió darle amnistía a los delincuentes y que su estrategia de seguridad está basada en “dar abrazos” y en “acusar a los delincuentes con sus mamás”.
.@lopezobrador_ es el presidente de los #Narcos, del #pacto y #contubernio con el CO. No le interesa dejarnos a los mexicanos de bien ser víctimas de los criminales. ni siquiera el ejército le importa, él sólo vela por los derechos humanos de maleantes.#amnistía#INSEGURIDAD pic.twitter.com/aJmCowczsH
— Adriana Pérez (@7Adrix) February 18, 2020
Con información de Infobae
MSA