Moody’s tiene mala noticia para la economía global y industria del petróleo

Las economías del G-20 resintarán serías caídas en su PIB por culpa de la pandemia y el confinamiento

Moody´s
Especial

Para la agencia Moody’s el futuro de la economía global y de los precios del petróleo no es nada alentador, pues este martes recortó sus previsiones, por lo que ahora estima que las restricciones derivadas del coronavirus ocasionarán una contracción del 4 por ciento dentro del Grupo del G-20 este año, pero prevé un crecimiento del 4.8 por ciento para el 2021.

Las previsiones de Moody´s son más negativas que las expuestas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), el cual proyectó una caída del 3 por ciento en el PIB mundial, mientras que S&P Global estableció un recorte del 2.4 por ciento.

Las economía más afectadas serían las de Estados Unidos, con un descenso de 5.7 por ciento; Japón, 6.5 por ciento; Reino Unido, 7 por ciento, e Italia con 8.2 por ciento.

Caso contrario sucedería con China, pues se prevé que crezca uno por ciento este año, y para el 2021 su PIB se recuperará hasta en 7.1 por ciento.

“Hay riesgos significativos a la baja en nuestras proyecciones en caso de que la pandemia no pueda ser contenida y se tengan que reinstalar las cuarentenas“, aseveró la agencia en su reporte.

Moody´s también detalló que sin confinamientos extensos, una dinámica en la interrupción sostenida podría “resultar en una destrucción a gran escala de negocios y de segmentos completos, además de derivar en una tasa de desempleo muy alta”, situación que daría pie “a una baja persistente en el consumo y la inversión”.

La industria energética tampoco se salvó de las reducciones de Moody´s, sobre todo ahora que los precios del crudo Brent promedían 35 dólares por barril y los del petróleo estadounidense WTI se cotizan en 30 dólares el barril en 2020, aunque cabe la posibilidad de que reboten a 45 y 40 dólares el próximo año, respectivamente.

“La crisis tiene implicancias de largo plazo en la estructura de la economía global (…) Estos cambios inevitablemente tendrán costos en términos de eficiencia y comercio internacional. Podrían acarrear además profundas implicancias geopolíticas”, concluyó Moody´s.

Con información de Milenio