Mandos militares y navales encabezan las secretarías de seguridad de 15 estados del país, de los cuales la mayoría son gobernados por Morena.
Tan sólo en el último año, 11 gobernadores relevaron a sus titulares de Seguridad Pública estatal, en seis casos nombraron a militares o marinos y sólo en cinco a civiles.
El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla destituyó al general José Alfredo Ortega luego de una protesta de elementos de la Guardia Civil quienes exigían mejoras en sus condiciones laborales.
El mandatario estatal cedió el puesto a Juan Carlos Oseguera Cortés, quien era subsecretrio de Gobierno y su trayectoria política incluye una jefatura de departamento en el Instituto Electoral de Michoacán (IEM), asesor en el gabinete y en la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroalimentario durante el gobierno de Silvano Aureoles.
Anteriormente, Delfina Gómez, gobernadora del Estado de México, recibió la renuncia de su jefe de seguridad estatal, Andrés Andrade —un civil— y le dio el cargo al militar Cristóbal Castañeda.
Recientemente, Evelyn Salgado, gobernadora de Guerrero, nombró a Josué Barrón Sevilla, coronel de infantería del Ejército Mexicano, como nuevo secretario de Seguridad Pública del estado.
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Si bien algunas entidades como Michoacán o San Luis Potosí optaron por cambiar de mandos militares a civiles; otras como el Estado de México o Tabasco hicieron lo contrario: cedieron el control de la seguridad pública a generales del Ejército.
El teniente Cristóbal Castañeda Camarillo fungió como secretario de Seguridad en Sinaloa, donde enfrentó los llamados “Culiacanazos”, los operativos —uno fallido y uno exitoso—para capturar a Ovidio Guzmán, hijo de El Chapo Guzmán.
En los casos de Guerrero, Sinaloa,Tlaxcala y Quintana Roo, sus gobiernos decidieron hacer un cambio en el mando de seguridad, aunque optaron por seguir con militares en el cargo.
Por su parte, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) publicó en septiembre de 2023 un estudio sobre seguridad estatal en el que se advertía que, para ese momento, 14 entidades del país mantenían como mandos de seguridad a elementos provenientes de las Fuerzas Armadas.
“Militares no han demostrado tener mayor capacidad en el combate a la inseguridad”
Ante esta situación, David Saucedo, especialista en seguridad pública, advirtió que, mientras toda la opinión pública se enfocaba en la militarización a nivel federal, “en los estados se daba una militarización silenciosa”.
“En 2023, 14 entidades del país mantenían como mandos de seguridad elementos provenientes de las Fuerzas Armadas”, expresó.
De acuerdo con Saucedo, en la mayoría de estados gobernados por Morena los titulares del Poder Ejecutivo nombraron a mandos militares para que ocuparan la secretarías de Seguridad Pública con el fin de establecer una conexión directa con la Guardia Nacional (GN).
“Lo que tenemos es una estrategia federal que se convirtió también en una estrategia estatal. Lo que buscaron evidentemente fue establecer una conexión entre los representantes de la Guardia Nacional”, advirtió.
Respecto a los resultados de mandos militares al frente de la seguridad estatal, David Saucedo apunta que quedan a deber.
“No han demostrado tener mayor capacidad que los civiles en el combate al crimen organizado o a la inseguridad”, dijo.
Por último, señaló que los nombramientos de secretarios de Seguridad no requieren la aprobación del Poder Legislativo de los estados, “es una designación de manera vertical que realizan los gobernadores”.
Con información de El Sol de México
MSA