El candidato presidencial de la coalición Todos por México, José Antonio Meade, se sometió por segundo día consecutivo a una serie de preguntas por parte de periodistas. Y es que, luego de aparecer el día lunes en el programa Tercer Grado, de Televisa, este martes se presentó a una entrevista en Milenio Televisión.
Durante más de hora y media, el aspirante del PRI tuvo un encuentro ríspido con Carlos Marín, Azucena Uresti, Héctor Aguilar Camín, Juan Pablo Becerra Acosta, Carlos Puig y Jesús Silva Herzog; quienes cuestionaron insistentemente al candidato.
A diferencia del debate que organizó Milenio en abril pasado con Andrés Manuel López Obrador, hubo ocasiones en que Meade Kuribreña no lo dejaron hablar para exponer sus ideas o responder sus preguntas. En repetidas ocasiones, fue interrumpido por Becerra y Puig.
“Pérame (sic.) déjame terminar (…) déjame plantear la idea”, se escuchó decir al ex titular de Hacienda ante los diversos señalamientos de los comunicadores.
Incluso, hubo un momento en que Carlos Marín les dijo a sus compañeros, “ya te respondió”, ante las interrupciones y cuestionamientos repetitivos de algunos de los entrevistadores.
Por su parte, el candidato de la coalición PRI-PVEM-Panal salió avante durante el debate ante los cuestionamiento “más duros”, y logró sortear temas como el del aborto o el matrimonio igualitario, sobre los cuáles afirmó ser respetuoso de la ley y la Constitución.
Meade también fue cuestionado sobre asuntos como la llamada “Estafa Maestra”, el PRI y el presidente Enrique Peña Nieto. Aseguró que en el supuesto caso de desvío de recursos en la Sedesol, se realizó la correspondiente investigación por parte de la Auditoría Superior de la Federación. Mientras que en el caso del partido tricolor, aseguró que se hace equipo para ganar y generar confianza y, que Peña Nieto es un hombre honesto.
El candidato del PRI les dijo a los periodistas de Milenio que las elecciones se ganan durante las campañas, y que aún le queda tiempo para remontar el lugar en que se encuentra.
Por lo pronto, el trato diferenciado a los candidatos en diversos espacios televisivos deja entrever que algunas corporaciones mediáticas ya defienden legítimamente sus intereses, anticipando una posible llegada al poder de “ya sabes quién”.
