#MásPoesía Alí Chumacero

 

LOS OJOS VERDES

 

Solemnidad de tigre incierto, ahí en sus ojos

vaga la tentación y un náufrago

se duerme sobre jades pretéritos que aguardan

el día inesperado del asombro

en épocas holladas por las caballerías.

Ira del rostro, la violencia

es río que despeña en la quietud el valle,

azoro donde el tiempo se abandona

a una corriente análoga a lo inmóvil, bañada

en el reposo al repetir

la misma frase desde la sílaba primera.

Sólo el sonar bajo del agua insiste

con incesante brío, y el huracán acampa

en la demora, desterrado

que a la distancia deja un mundo de fatiga.

Si acaso comprendiéramos, epílogo

sería el pensamiento o música profana,

acorde que interrumpe ocios

como la uva aloja en vértigo el color

y la penumbra alienta a la mirada.

Vayamos con unción a la taberna donde

aroma el humo que precede,

bajemos al prostíbulo a olvidar esperando:

porque el fin contemplamos la belleza.

 

Tomado de la antología de Juan Domingo Argüelles: Poesía mexicana. De la época prehispánica a nuestros días.