Los tres “Chapos” siguen prófugos en Argentina

En La Otra Opinión hemos seguido de cerca la fuga –de un penal de alta seguridad– de tres asesinos vinculados con el narcotráfico en Argentina. Los prófugos son los hermanos Cristian y Martín Lanatta, así como Víctor Schillaci. Los tres se encontraban recluidos porque, en 2008, asesinaron a tres empresarios farmacéuticos relacionados con el tráfico de efedrinas, la materia prima para fabricar metanfetaminas.

Es preciso señalar, también, que esta sustancia –la efedrina– es muy codiciada en países como México, donde su venta es ilegal; mientras que en la Argentina de Néstor Kirchner –entre 2003 y 2007– se legalizó la importación de este componente.

Los tres prófugos, como probablemente sepa, estaban recluidos en la cárcel de máxima seguridad General Alvear, ubicada en Buenos Aires. No obstante, el 27 de diciembre del año que se fue, los tres utilizaron un arma de juguete para someter al personal de seguridad y huyeron de prisión.

Sin duda, esta fuga remite a la vergonzosa huida de Joaquín, el Chapo, Guzmán; quien escapó del penal del Altiplano el 12 de junio de 2015. Acaso por eso, algunos se refieren a los tres asesinos prófugos como los tres Chapos argentinos.

No está de más señalar que en Argentina, el tema cobró gran relevancia pues la fuga ocurrió cuando Mauricio Macri tenía tres semanas al frente del gobierno de su país. O si lo prefiere, cuando el presidente recién llegado todavía disfrutaba de la llamada luna de miel.

Hasta ahora han transcurrido once días desde el escape de los tres Chapos argentinos, en este tiempo la policía ha interrogado y detenido a presuntos vinculados con la fuga, se han llevado a cabo redadas, se han escrito hipótesis –acertadas y descocadas–, y apenas ayer ocurrió una persecución en la provincia de Santa Fe. Según se sabe, dos gendarmes resultaron heridos luego de un enfrentamiento con quienes estarían relacionados con el escape.

Destaca, además, que uno de los protagonistas del caso ha sido Aníbal Fernández, el ex jefe del gabinete de Cristina Fernández de Kirchner. Y es que uno de los ahora prófugos lo identificó como el líder de una red tráfico de efedrina y aseguró que en el bajo mundo lo conocen como “La Morsa”.

Hasta ahora, nadie ha podido comprobar las acusaciones en contra de Aníbal Fernández; no obstante, su nombre sigue vinculado al caso. De confirmarse las versiones en su contra, la propia Cristina Fernández estaría relacionada con una compleja red de tráfico de drogas.

Por otro lado, el gobierno argentino ha detenido a ocho personas que tendrían relación con la triple fuga. Según explican, estas personas serían investigadas por brindar apoyo logístico a los prófugos. Entre los arrestos destaca el del hermano de Víctor Schillaci, Franco Schillaci, y el del jefe de seguridad del penal, César Tolosa.

En otros temas, la fuga también descubrió que en las barras del club de fútbol Quilmes –y en otras–, se gestan asesinos y otros delincuentes que estarían ligados al narcotráfico. En esta lógica, Marcelo Mallo, ex líder de las Hinchadas Unidas Argentinas, fue detenido junto con su hija y su yerno. El arresto ocurrió luego de una redada en el domicilio de Mallo, donde la policía de Argentina pretendía encontrar pistas sobre el paradero de los tres Chapos argentinos. No obstante, en vez de reos fugados encontraron armas de procedencia y propiedad injustificada.

Mallo estuvo detenido algunos días y ayer, miércoles, se confirmó su liberación. Se dijo que las acusaciones en su contra fueron consideradas un delito excarcelable.

Finalmente, se sabe que 500 gendarmes buscan a los prófugos y nadie duda que mientras los tres Chapos sigan libres, el tema dará de qué hablar.