Carlos Loret de Mola asegura que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador realiza un “descarado esfuerzo” para posicionar al subsecretario de Seguridad Ciudadana, Ricardo Mejía, como el candidato de Morena a la gubernatura de Coahuila en 2023.
Para ello, ha empezado a asignar los contratos de compra de carbón a los empresarios locales.
En su columna “Morena, el negocio del carbón y la elección en Coahuila”, el periodista de El Universal señala que todos saben que la compra de carbón es una de las principales fuentes de financiamiento del partido guinda de cara a los comicios del siguiente año.
En ese sentido, expuso que la precampaña de Mejía Berdeja trae el apoyo de todo el aparato gubernamental para llevar a cabo actos masivos, con acarreo y el apoyo de otro gobernador del mismo partido.
Por ello, afirmó que la Cuarta Transformación se dio cuenta de la importancia de esa industria y tomó control del jugoso negocio, por lo cual aseguró que del carbón saldrá el presupuesto para la campaña en esta entidad, lo cual se relaciona con la apuesta del mandatario tabasqueño por las energías sucias y es que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) es el gran cliente y Coahuila es productor líder latinoamericano.
“Es decir, con una mano se pone al candidato y con la otra se amarran las aportaciones”, resaltó.
Abren espacio para dejarle el camino a Mejía Berdeja
Por otro lado, Loret de Mola destacó que en los sexenios anteriores la corrupción había establecido los “códigos de carbón”, en los cuales el gobierno estatal adjudicaba los contratos.
No obstante, la administración morenista desmanteló esos “códigos” y encargó un censo de carboneros con la promesa de que ya no todos los contratos los tendrían los grandes empresarios.
Por otro lado, comentó que existen sospechas de que la precampaña del Ricardo Mejía también se financie “con dinero desviado del Programa de Construcción de Paz de la Secretaría de Seguridad Ciudadana federal, con recursos que llegan del gobierno de Sonora (su padrino político es el gobernador Alfonso Durazo) y con presupuesto de Diconsa (ya se sabe que todo Segalmex es un cochinero”.
Asimismo, destaca que incluso el senador disidente, Ricardo Monreal, ha mandado señales a sus allegados para que se bajen de la contienda, por lo que Armando Guadiana, también miembro del Senado de la República; Javier Guerrero, que es funcionario del IMSS y Noé Garza, exdiputado salinista y gran amigo de Jaime Rodríguez Calderón, deberían dejarle el camino libre a Mejía Berdeja.
Con información de El Universal
MSA