Este martes, la administración de Andrés Manuel López Obrador, por medio del secretario de Salud, Jorge Alcocer, publicó en el Diario Oficial de la Federación un decreto que permite a los adultos de la tercera edad faltar a sus empleos ante el brote coronavirus en México.
Dicha acción tiene como objetivo evitar contagios, ante ello los sectores público, privado y social darán paso a que los adultos mayores de 65 años o más no asistan a sus centros de trabajo, al igual que población vulnerable a la enfermedad. Sin embargo, deben gozar de sueldos y prestaciones.
Con base en el decreto federal, el sector de personas que son vulnerables al COVID-19 y pueden desarrollar la fase grave de la enfermedad, incluyen a:
- Mujeres embarazadas o en periodo de lactancia
- Menores de 5 años
- Personas con discapacidad
- Personas con enfermedades crónicas no transmisibles (personas con hipertensión arterial, pulmonar, insuficiencia renal, lupus, cáncer, diabetes mellitus, obesidad, insuficiencia hepática o metabólica, enfermedad cardiaca)
- Personas con algún padecimiento o tratamiento farmacológico que “les genere supresión del sistema inmunológico”
Por otro lado, las dependencias y entidades de la Administración Pública Federal —al igual que las organizaciones del sector social y privado— deberán a llevar a cabo una logística que les permita continuar con sus operaciones, sobre todo si deben ayudar en la mitigación y control de la de enfermedad.
Mientras que en el sector privado, empresas y negocios, como hospitales, clínicas, farmacias, laboratorios, servicios médicos, financieros, telecomunicaciones, medios de información, etcétera; también podrán seguir con sus labores, siempre cuando no sea en espacios cerrados que permitan aglomeraciones.
Dado que la “Cuarta Transformación” no ha hecho lo necesario para hacerle frente al coronavirus, resulta difícil saber si estas medidas podrán evitar que esta nuevo mal afecte a los sectores más vulnerables de la sociedad.
Con información de Político MX
