Ayer, el gobierno mexicano festejó la ratificación del T-MEC, a pesar de que este año no quedará lista y hubo mucho que no se dijo; pues una de las condiciones fue que Estados Unidos podrá realizar labores de vigilancia sobre el cumplimiento de la Ley laboral mexicana y pedir un panel de expertos cuando se viole la democracia sindical.
La nueva vigilancia laboral, así como reglas más duras en insumos para el sector automotor y vigilancia al medioambiente, son parte central del documento que firmaron representantes de los tres países en presencia del presidente Andrés Manuel López Obrador.
De esta forma, aunque no se incluyeron los inspectores laborales como pedía el gobierno de Donald Trump, se estableció una nueva figura de “Agregados Laborales” enviados al país para que suministren información desde el lugar de los hechos sobre las prácticas laborales en México.
Con información de Reforma.