La oposición se divide; se beneficia el PRI

En la próxima elección presidencial se vislumbra un escenario muy reñido en las intenciones del voto de los ciudadanos indecisos y sin militancia partidista. Sin embargo, los partidos no deben quitar la mirada de sus clientelas y “voto duro”, que ha sido determinante en comicios recientes.

A pesar de que el voto duro de la mayoría de los partidos ha decrecido, en este proceso electoral puede ser un factor de especial importancia, debido a que algunos institutos políticos, como el PRD y el PAN, han sufrido desbandadas o divisiones internas.

Y es que, por el contrario, el PRI es el único partido que ha registrado un incremento en sus niveles de voto duro, y tiene presencia en casi todas las entidades del país. Ello incluso a pesar de todos sus negativos y detractores, según reveló un estudio del periódico El Universal, publicado este lunes.

A las izquierdas, en cambio, les perjudica el divorcio del PRD y  Morena. Con la salida de  AMLO del Sol Azteca, se divide el voto duro tanto del tabasqueño como del PRD, así como algunas de sus clientelas (Super Barrio, UPREZ, los Panchos Villa, entre otros).

El PRD, también puede debilitarse debido a que algunas de las tribus que permanecen en el partido podrían no apoyar a Ricardo Anaya. Lo mismo puede ocurrir en el caso de Morena, donde muchos militantes no apoyarían a candidatos propuestos por el PES, o a perfiles vinculados al PAN.

En el caso del PAN, perjudica la salida de la ex primera dama y el conflicto con el ex presidente Felipe Calderón, así como la salida de panistas que no comulgan con el candidato Ricardo Anaya: Javier Lozano, José Luis Luege y Luisa María Calderón, entre otros. Es previsible que estos militantes se lleven consigo algunos votos azules, algunos de los cuales irían a las arcas del candidato del PRI.

Este solo es un panorama del voto duro y clientelar, modalidad inaugurada por el expresidente Lázaro Cárdenas en 1940, utilizando a las organizaciones obreras y campesinas (CTM Y CNC) para imponer el triunfo de su sucesor Manuel Ávila Camacho contra el fuerte candidato opositor Juan A. Almazán. A 78 años de distancia, el voto duro aunque viene a la baja será parte fundamental en esta elección.