Esta mañana Rubén Núñez, líder de la Sección 22 de la CNTE, fue liberado del penal de Santa María Ixcotel, bajo caución –es decir que no podrá presentarse en actos públicos–, luego de pagar una fianza de 70 mil pesos por dos causas.
Con el maestro también salió de la cárcel el secretario de organización de la Sección 22, Francisco Villalobos. El monto que éste pagó fue de 120 mil pesos por cuatro causas.
Cabe recordar que a los miembros de la Coordinadora se les acusó de lavado de dinero y robo de libros de texto gratuito, delitos por los que pasaron poco más de dos meses recluidos, primero en el penal de Hermosillo, Sonora, y luego en el reclusorio de Miahuatlán, en Oaxaca.
Su liberación hace evidente que la ley en México es negociable, que siempre será posible doblar a la autoridad por medio de chantajes, tal como lo ha venido haciendo la CNTE desde que inició sus protestas por la reforma educativa.
Por otro lado, el hecho ocurre a un mes de que la Segob y la Coordinadora llevaran a cabo mesas de diálogo con el fin de terminar con el problema; sin embargo, hasta la fecha el único cambio que se ha visto a partir de ese momento es la liberación de los dos delincuentes.
En este portal señalamos el 12 de julio –fecha en la que Núñez fue trasladado de prisión– que era previsible esta situación, y es que a todas luces el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien casualmente tiene el control de todas las prisiones del país, cerró varios tratos con el magisterio, los cuales incluían la salida de la cárcel de Núñez y Villalobos.
De este modo, en La Otra Opinión nos preguntamos ¿Quién sigue? ¿A Heriberto Magariño no lo van a liberar? ¿Y qué hay de Aciel Sibaja? ¿Y la señora Elba Esther? ¿Ellos cuándo dejarán la prisión en calidad de mártires, tal como lo han hecho este día Rubén Núñez y Francisco Villalobos?
