Luego de que este fin de semana se dio un enfrentamiento en Nochixtlán, Oaxaca –entre la Policía Federal e integrantes de la CNTE–, el diputado independiente al Congreso de Oaxaca, Jefte Méndez, dijo en entrevista con La Otra Opinión que existen organizaciones sociales en el estado que engrosan las filas del movimiento y toman el control del magisterio disidente.
Méndez indicó que los interesados en sembrar el caos suelen echar mano de las organizaciones que nutren las marchas, los bloqueos, los saqueos y los desmanes que caracterizan a la CNTE. Sin embargo, apuntó que los hechos de este fin de semana estuvieron fuera de la normalidad. Y es que el nivel de violencia de Nochixtlán no se veía desde 2006, en los días del gobierno de Ulises Ruiz.
Si bien ya pasaron 10 años de la APPO, para el diputado oaxaqueño se repite la historia de un conflicto que no se solucionó de fondo, un problema “al que solo le pusieron curitas”.
Por ejemplo, Jefte Méndez argumenta que no se tocó el financiamiento público –de millones de pesos–, de estas organizaciones sociales que viven del erario público.
Por eso, a 10 años de la APPO, seguimos viendo agrupaciones violentas que son capaces de poner de cabeza a la autoridad; por eso, no debería extrañar que igual que ocurrió hace una década, pronto se eche a andar el manual de la guerrilla urbana; y en Oaxaca se vea el cierre de comercios, los bloqueos, la falta de transporte público, y otras acciones que suelen implementar estas organizaciones.
Basta señalar que este lunes, únicamente el 10 por ciento de las empresas operaron con normalidad.
Y es que para Méndez, la sociedad es la única afectada por los desmanes de los grupos desestabilizadores. Pues los que trabajan lejos se trasladan a pie, en bici o en cualquier otro medio disponible, ante la falta de transporte público.
A lo anterior habría que agregar que, en palabras del diputado Méndez, grupos afines de Chiapas, Guerrero, Yucatán y otros estados llegarán pronto a Oaxaca para reforzar las acciones de la CNTE y de la Sección 22. Estos grupos buscan, según Jefte Méndez, alargar el problema hasta la Guelaguetza, que es cuando el chantaje al gobierno les deja más dinero.
El diputado independiente señaló también que la mayoría de los que participaro en los hechos violentos del fin de semana no eran profesores. Se trata más bien de grupos bien organizados que están tomando el control del magisterio, mientras que los maestros se hacen a un lado.
Según Méndez, hay actores políticos que esconden la cara pero sin duda alimentan el movimiento. Cabe recordar que en 2006 hubo intereses perversos atrás de la APPO, y para Jefte Méndez, esta vez no sería distinto.
El diputado oaxaqueño indicó que las organizaciones que respaldan a la Sección 22 lo hacen porque buscan defender sus intereses y la misma Sección 22 no prohíbe la entrada a infiltrados o anarcos. Se queda callada, se quedan mirando cómo causan destrozos y
cómo tienen el control.
Para Méndez, el aparato estatal y federal debe de trabajar al límite de su capacidad para esclarecer lo ocurrido. Después de todo, los muertos –hasta el momento seis– fueron ultimados por proyectiles de arma de fuego.
Méndez puntualizó que los grupos violentos utilizan el movimiento magisterial para desestabilizar al país. O si lo prefiere, que lo que vimos el fin de semana nada tienen que ver con la lucha magisterial.
Por cierto, en Juchitán, el periodista Elidio Ramos Zárate fue asesinado mientras cubría el conflicto. Para Jefté Méndez este hecho confirma que estamos ante el mismo modus operandi de 2006: ajusticiar a los críticos del magisterio.
Asimismo, Méndez cuestionó a las voces que hablan en favor de los policías heridos y del periodista muerto, además de los 11 policías estatales retenidos, de los que nadie alza la voz por ellos.
De acuerdo con Jefte, nadie ha escuchado el clamor de los familiares que saben que sus familiares están heridos o detenidos.
