Con el pasar de los años, el gobierno, tanto de la Ciudad de la México como del Estado de México, ha ignorado la vulnerabilidad del Sistema Cutzamala.
Cabe recordar que las sequías de 2021 dejaron en un nivel históricamente bajo a las presas del Sistema Cutzamala, pero ahora se sumó un desperfecto que tiene en jaque a ese acueducto que provee un 26 por ciento del agua que se usa en el Valle de México.
Además, a dicho sistema hidráulico, que en este 2022 cumple cuatro décadas de operación, cada vez se le notan más los años y la falta de inversión para su mantenimiento así como para la recarga de las cuencas de las que se extrae el agua para su uso en la megalópolis.
Sin embargo, tal situación no debería de tomar por sorpresa a la Conagua y a los gobiernos de capital y el Edomex, ya que desde mayo del año pasado el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua advirtió de la vulnerabilidad de ese sistema en un documento que se puede consultar en el sitio web del gobierno federal.
Pese a que hay estudios que demuestran este hecho, el gobierno, tanto de la Ciudad de la México como del Estado de México, ha ignorado la vulnerabilidad del Sistema Cutzamala.
Con información de Reforma
JZ
