El equipo de la actual administración del presidente Enrique Peña Nieto, complicó y dificultó la lucha contra la corrupción, debido a que algunos secretarios de Estado se incomodaron y molestaron por el trabajo que realizó la Secretaría de Función Pública (SFP) para aclarar esquemas de corrupción.
“Es muy difícil. Cuando comenzamos en la secretaría a poner orden en los Órganos Internos de Control hubo algunos que se rehusaron a entregarnos en principio la información”, dijo la titular de la SFP, Arely Gómez, en entrevista con Excélsior.
No obstante, mencionó que el presidente Peña Nieto nunca le pidió detener dicha investigación o proteger a algún colaborador que consideraba sospechoso de cometer actos de corrupción y se dedicaron a hacer daño a la credibilidad del gobierno.
“La lucha contra la corrupción en el gobierno es compleja y difícil, incluso hubo secretarios de Estado que se molestaron por el trabajo que se realizó para romper inercias o esquemas de corrupción”, reveló Arely Gómez.
Ante la reducción de salarios, la secretaria de la Función Pública, explicó que el monto de salarios no determina el grado de corrupción de un servidor, ya que hay empleados que ganan bastante dinero e incurren a realizar actos de corrupción, mientras que existen también aquellos que no ganan tanto y su comportamiento es “intachable”.
En entrevista con Excélsior, la secretaria de la Función Pública, mencionó que se siente satisfecha por el trabajo realizado, ya que se castigó a varios casos como Odebrecht, el socavón del Paso Exprés y los desvíos de universidades públicas con empresas fantasmas.
