A pesar de que el Sistema Nacional de Búsqueda de Personas desaparecidas tiene facultad directa sobre el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas y por ley deben tener sesiones cada seis meses, se reportó que durante este año no se ha sesionado ni una vez.
Ante esto, colectivos, consejeros ciudadanos, así como el Comité contra la Desaparición Forzada (CED) de la ONU, exigieron que se aclare la metodología que se está llevando para actualizar el Registro o censo instruido por el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Hay que recordar que la actualización de este Registro se da después de que a inicios de este año se anunció el programa de búsqueda con vida, el cual usaría varias bases de datos de búsqueda junto con el del Registro, pues de acuerdo al gobierno, la cifra de personas desaparecidas no coincidía con los datos oficiales.
Natalia Cordero, consejera de la comisión local de la Ciudad de México y acompañante del Movimiento por Nuestros Desaparecidos en México, destacó la falta representatividad del resto de los estados en este tema, sobre todo de las comisiones de búsqueda y de las fiscalías estatales.
Una de las principales preocupaciones es la falta de participación del Sistema Nacional de Búsqueda, organismo que es el eje que conjunta a diversas dependencias de diferentes niveles encargadas en desapariciones.
A los colectivos les preocupa la exclusión del Sistema Nacional de Búsqueda de este proyecto, sobre todo, considerando que el país está comenzando su periodo de transición política. Además desde la renuncia de su titular, este organismo quedó debilitado.
Además de la nula participación del Sistema, los integrantes de los diferentes colectivos critican la metodología con la que el censo se está realizando, pues el ir de puerta en puerta preguntando por datos personales pone en riesgo a los familiares de personas desaparecidas, ya que muchos han tenido que dejar sus hogares tras amenazas.
De acuerdo a lo dicho por los integrantes de estos colectivos, el SNB no ha sesionado desde septiembre del año pasado, ocasionando que no se tenga información sobre el Protocolo Homologado de Búsqueda, así como el de seguimiento para la construcción del sistema único de Información Tecnológica e Informática (SUITI).
Entre las preocupaciones alrededor de este tema, también está el desajuste entre entidades, pues cada estado implementa sus propias pautas en términos de búsqueda de personas, evitando que a nivel nacional se tenga un modelo homogéneo que ayude a que la información se tenga accesibles para todos los que integran comisiones y colectivos.
Ante la falta de información en este tema, la Comisión contra la Desaparición Forzada de la ONU aconsejó a México para que el gobierno siga el Protocolo Homologado de Búsqueda con base en los estándares internacionales.
Esta recomendación también denotó que el censo no se estaba realizando por autoridades y organismos competentes en la materia de búsqueda de personas, sino que otras instituciones lo estaban llevando a cabo, ocasionando que la metodología no fuera la correcta, además de que se le estaba negando el derecho a los familiares de personas desaparecidas la facultad para participar.
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