El Estado de México (Edomex) es una entidad peligrosa, hasta para las autoridades, ya sean policías, agentes o fiscales locales.
En los últimos años, el sur del Estado de México se convirtió en escenario de emboscadas y ataques contra las fuerzas municipales, estatales y federales por parte del grupo criminal La Familia Michoacana, lo que dejó varios elementos muertos o heridos.
De 2019 a la fecha, habitantes de municipios como Ixtapan de la Sal, Zacazonapan, Sultepec y Texcaltitlán fueron testigos de los estragos que provoca la pelea por el control territorial de los grupos criminales para imponer sus reglas.
En 2022, Alejandro Gómez, entonces titular de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), renunció al cargo por el que lo designaron por siete años, bajo el argumento de “motivos personales”.
Sin embargo, antes de irse, reconoció que el narco se había apropiado de las cadenas de producción de pollo, pan y materiales de construcción, sobre todo en la zona sur de la entidad.
Donde, según testimonios recabados previamente, los habitantes tenían que pagar entre 5 y 6 pesos por un bolillo, cuando el precio comercial en la zona centro del país y de la entidad era de 2 pesos.
En medio de denuncias de extorsión y cobro de piso, el fiscal partió de la institución asegurando que el problema del crimen organizado le atañía al gobierno federal, justificando que aún así los agentes estatales investigaban los casos.
Estado de México: entidad peligrosa… hasta para las autoridades
Uno de los golpes del crimen organizado contra la administración del entonces gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo Maza, se registró en marzo de 2019:
Cuando al fiscal regional de Ixtapan de la Sal, Mauricio Blancas Valerio, lo emboscó un grupo armado en la carretera Zacualpan-Almoloya de Alquisiras.
El fiscal regional resultó herido junto con sus tres escoltas, uno de los cuales murió a causa de las heridas de bala.
De acuerdo con las investigaciones, el ataque lo orquestaron por líderes de La Familia Michoacana.
En marzo de 2021, elementos de la Secretaría de Seguridad del Estado de México (SSEM) y de la FGJEM en Coatepec Harinas sufrieron un par de ataques, que dejó 13 policías asesinados.
A los agentes los emboscaron en dos eventos. El primero ocurrió en la comunidad de Llano Grande, donde fallecieron cinco elementos de la Fiscalía y cuatro de la SSEM.
Mientras que a los otros cuatro policías estatales los atacaron en la carretera Vieja a Zacualpan rumbo a Almoloya de Alquisiras.
La Familia Michoacana toma el control
En mayo de 2022, ya con el nuevo fiscal estatal, José Luis Cervantes, un grupo armado atacó las instalaciones de la FGJEM en Sultepec y colocaron barricadas y un vehículo incendiado para bloquear una carretera de este municipio.
Según las indagatorias, Valentín ‘N’, operador de La Familia, fue el encargado del ataque y detenido días después.
Un mes después se registró otro enfrentamiento, en el que un grupo de sujetos armados atacó a elementos de la Secretaría de Marina y la Guardia Nacional, dejando un saldo de 11 integrantes del grupo criminal muertos.
Tras repeler la agresión también fueron detuvieron a 10 criminales y aseguraron 20 rifles de asalto R-15, armas cortas, cartuchos útiles, uniformes tipo militar, chalecos antibalas y cinco autos blindados.
En julio de este año, en el municipio de Villa Guerrero, a agentes municipales los agredieron a balazos, aunque no se reportaron lesionados.
Además, en el mismo mes, a elementos de la Guardia Nacional los atacaron en Zacazonapan, en la carretera hacia Luvianos, al realizar recorridos de vigilancia, lo que dejó un agente muerto y otro más con lesiones.
Tragedia en Texcaltitlán
En octubre de este año, la FGJEM reportó la detención de Saday ‘N’, alias el R-10, integrante de La Familia Michoacana, identificado como un objetivo prioritario y por quien las autoridades ofrecían una recompensa de 300 mil pesos.
Tras un enfrentamiento registrado el pasado 8 de diciembre entre pobladores de la comunidad de Texcapilla, municipio de Texcaltitlán, y pistoleros de La Familia, que dejó 4 ciudadanos muertos y 10 criminales abatidos, entre ellos Rigoberto de la Sancha Santillán, alias ‘El Payaso’, quien era líder regional de la organización delictiva, otro ataque contra las fuerzas del orden se registró.
Un día después, en el municipio de Malinalco, a policías estatales y militares los atacaron, lo que dejó un elemento de la Secretaría de la Defensa Nacional herido y fuera de peligro.
Básicamente, desde que arrancó el gobierno de AMLO, el Estado de México se convirtió en una entidad peligrosa, hasta para las autoridades.
Las masacres en Celaya, en Texcaltitlan y en Salvatierra son parte de las 427 masacres que hemos contabilizado en el año, sin que la @GN_MEXICO_ detenga a los criminales, ya ni hablar que las evite.#MexicoEstaDeLuto https://t.co/NSiCVjh381
— Maria Elena Morera (@MaElenaMorera) December 20, 2023
Con información de Reforma, El Sol de México y El Universal
JZ
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