Este viernes 27 de mayo, el Congreso de la Ciudad de México aprobó en lo general y en lo particular la reforma al Código de las Instituciones y Procedimientos Electorales local para reestructurar al Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM).
Con ello, se pretende reestructurar este órgano electoral para ajustarlo a la política de austeridad republicana.
Los diputados locales de oposición calificaron la decisión como un atentado a la autonomía electoral y acusaron que Morena busca desmantelar y debilitar al árbitro electoral, ya que se plantea la eliminación de siete áreas estratégicas; entre ellas: La Unidad Técnica de Fiscalización, el Centro de Formación y Desarrollo, la Unidad de Vinculación con Organismos Externos, la Unidad de Género y Derechos Humanos, y la Unidad Técnica de Archivo, Logística y Atención a Órganos Desconcentrados.
Además reduce en un centenar de puestos laborales la nómina del organismo y eficientiza la función del Instituto.
Tras ello, diversos especialistas advirtieron que esta reforma es un experimento de la Cuarta Transformación con el cual busca mermar al Instituto Nacional Electoral (INE) u otros órganos locales.
Puede ser un experimento para ver si tribunales validan este tipo de reformas
Durante una entrevista otorgada a El Universal, Javier Santiago, expresidente del Instituto Electoral capitalino, señaló que la lógica del partido guinda es ir limitando el presupuesto a los órganos electorales de los estados, previendo que se apruebe a nivel federal la reforma que contempla desaparecer los Organismos Públicos Locales Electorales (OPLE).
“La intención tiene el mismo rumbo en lo local y en lo federal: limitar presupuestalmente a los órganos electorales locales, pero en la lógica de la propuesta que tiene a nivel federal Morena, de desaparecer los institutos electorales de los estados”, comentó.
Señaló que el dictamen de la Comisión de Asuntos Político-Electorales siguió la técnica del “carnicero”, que consiste en recortar presupuesto sin tener un diagnóstico preciso de las funciones.
“Podrían suprimirse algunas áreas, hacerse ajustes, pero se tiene que hacer con cuidado para no afectar la función esencial que tiene la institución”, agregó.
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En este sentido, Juan José Tena, maestro en Estado de Derecho y Democracia en Iberoamérica por la Universidad del País Vasco, sostuvo que las modificaciones al instituto son un experimento para hacer lo mismo con todos los órganos electorales locales, aunque descartó que se pueda desaparecer al INE, pues recordó que Morena, a nivel federal, no tiene los votos suficientes para hacerlo.
“Puede ser un experimento para ver qué tanto después los tribunales validan este tipo de reformas: que se acote a los órganos electorales, que se les ahorque presupuestariamente y operativamente, y ahí sí creo que puede ser un experimento, podría ser un primer paso para ir viendo después la respuesta de los tribunales, si se validan o no este tipo de reformas”, comentó.
Sobre la reforma al IECM, el académico consideró que los ajustes institucionales y presupuestales hacia un órgano autónomo deben darse de manera conjunta y no unilateralmente, porque de ser así, no suelen salir bien.
Morena está haciendo una “guerra de guerrillas”
A su vez, Jessica Rojas, especialista en derecho electoral, indicó que más allá de un laboratorio, Morena está haciendo una “guerra de guerrillas”, es decir, posicionamientos políticos y amenazas de amedrentamiento hacia los órganos electorales locales, porque sabe que a nivel federal es muy difícil que se apruebe la reforma electoral del presidente Andrés Manuel López Obrador.
En contraparte, Gustavo López Montiel, especialista en temas electorales del Instituto Tecnológico de Monterrey (ITESM), recalcó que en general esta reforma al IECM no lo diezma, puesto que sus actividades centrales para organizar las elecciones locales no se verían trastocadas.
Con información de MVS Noticias y El Universal
MSA
