Eliminar candados para la consulta popular: el peligro tras la propuesta de AMLO

Mario Delgado, diputado electo y aspirante a coordinar la bancada de Morena en la Cámara Baja, aseguró en entrevista con Ciro Gómez Leyva que los legisladores de la coalición “Juntos Haremos Historia” buscarán “eliminar todas las trabas” para la realización de consultas populares y referéndums.

Lo anterior —dijo Delgado— a “propuesta” del virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, y con el objetivo de que “la gente opine” sobre decisiones que implican el uso de recursos públicos, como la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.

Ya desde el pasado 11 de julio, al presentar la que será la agenda legislativa de Morena para lograr la “cuarta transformación”, López Obrador había mencionado que una de sus prioridades sería “establecer en la ley el mecanismo de Consulta para la revocaciòn de mandato y quitar trabas o candados para la aplicación de todos los procedimientos de consultas ciudadanas que deberán carácter vinculatorio”.

La pregunta es: ¿Cuáles son las “trabas o candados” a los que se refiere el tabasqueño?

La realización de consultas populares está regulada por el artículo 35 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, la cual establece a grandes rasgos:

  • Que “la consulta popular se realizará el mismo día de la jornada electoral federal.
  • Que la consulta sólo tendrá carácter vinculatorio cuando la participación corresponda a al menos el 40 por ciento de los ciudadanos inscritos en la lista nominal;
  • Que “no podrán ser objeto de consulta popular la restricción de los derechos humanos reconocidos por esta Constitución; los principios consagrados en el artículo 40 de la misma; la materia electoral; los ingresos y gastos del Estado; la seguridad nacional y la organización, funcionamiento y disciplina de la Fuerza Armada permanente”. Además“la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolverá, previo a la convocatoria que realice el Congreso de la Unión, sobre la constitucionalidad de la materia de la consulta”.

Si se atiende la declaración de Mario Delgado de que los legisladores de Morena buscarán “eliminar todas las trabas” para la realización de consultas populares, tenemos que —de conseguir su objetivo— AMLO y su partido podrían:

  • Convocar a consultas populares cuando se les dé la gana, sin importar si la realización de la misma coincide o no con elecciones federales.
  • Convertir el resultado de una consulta popular en vinculante, sin importar que el número de personas que participen en la misma no sea representativo. Una minoría podría decidir por todos.
  • Poner a consulta temas relacionados con derechos humanos o seguridad nacional, entre otros temas.

Entonces, ¿Cuál sería el peligro de eliminar los “candados” que regulan la celebración de consultas populares?

De acuerdo con el analista político Fernando Dworak, “Si bien la consulta populares un instrumento útil dentro de los mecanismos  considerados “participativos”, hay que tener cuidado con su diseño, pues se puede empoderar al ejecutivo para controlar la agenda de discusión. Algo similar se  puede decir de la revocación del mandato: es un procedimiento extremo sobre el que se deben tener controles. Si un gobernante puede convocarlo unilateralmente se usaría para legitimarlo en vez de exigirle cuentas”.

Eliminar las disposiciones legales que regulan la consulta popular es un peligro. En primer lugar, porque el próximo presidente podría —en términos prácticos— “saltarse” al poder Legislativo. ¿Para qué negociar con la oposición en las cámaras la viabilidad de perdonar a criminales, si López Obrador le puede preguntar directamente al pueblo? Quedarían socavados los principios de la democracia representativa

Además, potencialmente podría haber tantas consultas populares como al presidente se le ocurra, lo cual incluso atentaría contra los principios de austeridad, pues organizar dichos ejercicios tiene un alto costo.

Y por último, pero quizá más importante, eliminar los candados pondría en riesgo derechos humanos. No olvidemos que en su momento, López Obrador propuso someter a consulta temas como el matrimonio igualitario o la adopción homoparental. Con las consultas como populares como mecanismo cotidiano de toma de decisiones gubernamentales, las mayorías podrían pasar por encima de los derechos de las minorías.