El PRD al borde del precipicio: Pascoe

Para nadie es un secreto que el PRD vive una de sus peores épocas.

No sólo perdió espacios en la Cámara de diputados y en la Ciudad de México durante la elección intermedia de 2015; además está en riesgo de enfrentar una de las peores elecciones de su historia.

En este momento, el PRD no ha construido una sola candidatura competitiva. En las 12 entidades que elegirán gobernador, el Sol Azteca se encuentra sumergido en riñas, en venganzas o en la nulidad absoluta.

Por ejemplo:

En Sinaloa, Puebla e Hidalgo no han formalizado la elección de su candidato.

En Oaxaca, los perredistas no eligieron al más adelantado en las encuestas y el PRD local dobló al CEN.

En los otros cuatro estados que habrá alianza con el PAN, tres candidatos son panistas; y el de Zacatecas fue impugnado.

Y en Chihuahua, los amarillos eligieron a un cercano al gobernador priista César Duarte.

En resumen, son malos tiempos para el PRD.

En entrevista para La Otra Opinión, el ex militante de este partido, Ricardo Pascoe Pierce, advirtió que el partido vive una crisis muy profunda. Explicó que el PRD pierde cuadros y la sangría de sus bases es enorme. En opinión de Pascoe, es palpable la dificultad con que el PRD ha construido sus candidaturas.

De hecho, para el analista, la crisis del PRD es tan grave que incluso se pactan alianzas con la intención de que no pierda el registro. Y es que queda claro que no existe una fuerza –o la representatividad– para que los amarillos consoliden una participación significativa.

Ricardo Pascoe piensa que la crisis el Sol Azteca no es terminal. Sin embargo, también reconoce que el partido se quedó sin bastiones para resistir las embestidas de la competencia: como Morena, el PAN y los candidatos independientes. Es así que no sería extraño que luego del cinco de junio, el PRD se convierta en la cuarta o la quinta fuerza a nivel nacional.

Ricardo Pascoe advierte, además, que la crisis del PRD no obedece a una pérdida de identidad o congruencia ideológica; después de todo, en el mundo se han desdibujado las diferencias entre izquierdas y derechas. Aun así, una cosa es cierta: el PRD no ha sabido presentarse como una alternativa, como una opción distinta o como un partido que no se equivoca, que no abusa o que no se excede como hace el PRI.

En esa lógica, el PRD parece igual al resto, el PRD dejó de ser un partido relevante y el PRD parece haber perdido las ideas.

Y por eso, según Ricardo Pascoe, el PRD se encuentra al borde del precipicio.