Desde 1917, el fuero constitucional garantiza inmunidad e impunidad a servidores públicos de los tres órdenes de gobierno y los tres poderes de la unión, pues es un privilegio que fue creado como un instrumento para garantizar las libertades básicas de expresión y acción de los opositores al régimen.
Sin embargo, este instrumento se ha convertido en símbolo de corrupción e impunidad en los últimos años.
En entrevista para La Otra Opinión, el analista político Fernando Dworak comentó que el fuero constitucional es un fantasma en la política mexicana que ya no existe, y agregó que incluso la Suprema Corte de Justicia tiene problemas para interpretarla.
“Con López de Santana, se llegó a confundir el fuero con una palabra que no tenía efecto jurídico. Ahora no sólo hablamos de una herramienta que permite que un legislador no pueda ser molestado por sus comentarios en plenos y comisiones, hablamos de juicio de procedencia”, explicó Dworak.
Para finalizar, el analista destacó que gracias a distintos funcionarios en el país se ha interpretado al fuero como un sinónimo de corrupción, cuando se trata
