Ebrard utilizó granaderos en CDMX y AMLO ocultó informes sobre su uso

La Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum anunció la desaparición del Cuerpo de Granaderos a partir del próximo 1 de enero de 2019. Lo anterior, como parte de una deuda histórica con el movimiento estudiantil de 1968 y a raíz de las denuncias de abuso contra este cuerpo policiaco en la administración de su antecesor, Miguel Ángel Mancera.

No obstante, Marcelo Ebrard, nuevo Canciller fue uno de los jefes de gobierno que más utilizó este cuerpo. Mientras que el ahora presidente Andrés Manuel López Obrador, clasificó las acciones de los granaderos en un “archivo muerto”.

En el caso de Marcelo Ebrard, el uso de los granaderos se dio durante la época dorada de los megaproyectos inmobiliarios, donde era común el uso de esta fuerza en contra de vecinos opositores a las obras en diferentes delegaciones.

Tan solo en el año 2010, se utilizó en más de 5 veces esta fuerza contra opositores a la construcción de la Arena Ciudad de México y la edificación de un CENDI en un área verde del Deportivo “La Rosita”. Ambos casos solicitados por el ex delegado de Azcapotzalco Enrique Vargas Anaya, quien es señalado de violento e intolerante.

También destaca el caso del 28 de diciembre de 2010, cuando 80 vecinos de la colonia Narvarte que se oponían a obras de la Línea 3 del Metrobús fueron reprimidos con 600 granaderos. Y cómo olvidar a represión contra los opositores a la Supervía Poniente en julio de 2012, cuando granaderos detuvieron y golpearon al académico de la UNAM, Luis Zambrano, y a su esposa.

Por último, cabe recordar que en las manifestaciones del 1 de diciembre de 2012 —día de la toma de protesta del ex presidente Enrique Peña Nieto— la actuación de este cuerpo fue determinante en los diferentes puntos de la capital. Más adelante, el mismo Peña Nieto agradecería personalmente a Ebrard por la actuación de la policía capitalina.

En el caso de AMLO, una investigación de Animal Político en 2015, solicitó informes a la Secretaria de Gobierno del Distrito Federal, que los negó por estar clasificados como “archivo muerto”. Dicho término se usa para denominar a los documentos de administraciones pasadas. Esto porque que en el año aún no existía la oficina de Concertación Política de la Ciudad de México (DGCPyASyC), que comenzó a documentar las movilizaciones, ocultando esta información de la gestión de López Obrador.