Dinero para reconstrucción de CDMX, en manos de El Guatemalteco, El Tomate y el Führer

Los diputados Leonel Luna  y Mauricio Toledo del PRD, así como el panista Jorge Romero en su calidad de presidentes de comisiones Junta de coordinación Política, Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública, así como la coordinación panista están por tener en sus manos la suma de 7 mil 754 millones de pesos para la reconstrucción de la Ciudad de México tras el sismo del pasado 19 de septiembre ocurrido en la Ciudad de México.

Estos personajes fueron jefes delegacionales durante el trienio 2012-2015  en Alvaro Obregón, Coyoacán y Benito Juárez respectivamente. Sus administraciones estuvieron plagadas de acusaciones como, corrupción inmobiliaria, practicas clientelares, desvío de recursos y hasta abuso sexual .  Esto sonaría como una historia de gavilleros, pero no, estos tres son diputados en la Asamblea Legislativa.

A Leonel Luna Estrada conocido como “El Guatemalteco”, se le acusó en su momento de tener una cartilla militar falsa. Más adelante, él confesó que su madre era originaria de Guatemala. Inició su carrera en el PRD de la mano de René Bejarano. Durante su primer administración al frente de la Álvaro Obregón en 2006, proliferaron los “giros negros”. Además, en el famoso “Bar bar” se suscitó el atentado contra el exfutbolista Salvador Cabañas. Y por su fuera poco, inició el boom inmobiliario a lo largo de la calzada Desierto de los Leones y la zona patrimonial de San Ángel en su segunda administración.

Mauricio Toledo Gutiérrez, alias “El Tomate” es hijo de exiliados chilenos. Comenzó su carrera política de la mano de “Los Chuchos” y fue apuntalado por Marcelo Ebrard para arrebatar el poder a René Bejarano en Coyoacán. En 2009 como diputado federal y  se apoderó de la estructura partidista coyoacanense. En 2010 fue acusado de amenazar de muerte a opositores dentro del PRD. Como jefe delegacional, fue conocido como el “Señor de la caja de zapatos” por recibir cajas llenas de dinero por concepto de sobornos de empresarios gasolineros y constructores. El mote de “El Tomate” es por su constante mal carácter.

Jorge Romero Herrera, alias “El Führer” es hijo de médicos panistas. Inició su carrera en las juventudes panistas; después fue diputado local y jefe de gabinete de Mario Palacios, su antecesor como jefe delegacional de Benito Juárez. En 2012 llegó a la jefatura delegacional:  bajo su mandato se dio la consolidación del Boom inmobiliario en la Benito Juárez, así como desvíos de recursos en la remodelación de la alberca olímpica y complejos deportivos. Además, sus colaboradores Sergio Eguren y Rafael Medina estuvieron involucrados en un caso de acoso sexual a una mujer durante el mundial de futbol Brasil 2014.

Romero Herrera, al ser el único delegado electo del PAN en 2012, tuvo acceso a la dirigencia del partido en la Ciudad de México, a través de su amigo Mauricio Tabe Echartea. En el puesto, se deshizo de liderazgos como José Luis Luege y Mariana Gómez Del Campo, entre otros, por lo que se ganó el mote de “Führer” o “Patrón”. En 2016 estuvo involucrado en una polémica con la comunidad judía por declaraciones antisemitas.

En manos de estos personajes estará la responsabilidad de administrar los recursos del del Fondo para la Reconstrucción y del Fondo de Atención a los Desastres Naturales.