Este miércoles 4 de enero se celebra en México el Día Nacional del Periodismo, una fecha para hacer un homenaje a Manuel Caballero, considerado el padre del periodismo moderno en el país y quien falleció el 4 de enero de 1926 en la Ciudad de México.
Sin embargo, esta fecha es un recordatorio de que nuestro país no sólo es el lugar más peligroso para ejercer el periodismo, incluso por encima de países en guerra, como es el caso de Ucrania.
Sino que también se recuerda que el año pasado se registraron cifras inéditas de asesinatos de profesionales de la comunicación, que también sufrieron hostigamiento y persecución por parte del poder público.
“No hay nada que celebrar en uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo. Lo único importante es la oportunidad de recordar a los gobiernos y la sociedad que el periodismo, el derecho a la información y la democracia están en riesgo”, expuso a EFE la representante de Reporteros Sin Fronteras (RSF) en México, Balbina Flores.
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Según el recuento de RSF, 11 periodistas fueron asesinados durante el pasado año en México en relación con su trabajo, y otros 4 casos siguen bajo investigación, mientras que otros organismos, como la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), calculan hasta 20 casos.
Con ello, el 2022 se convirtió en el año más mortífero para los profesionales de la información en México, el “país en paz” más peligroso para la prensa y que concentró el 20 por ciento de los asesinatos de periodistas documentados por RSF a nivel global.
“Asesinaron a más periodistas que en Ucrania o Irak. Es muy impactante siendo un país en paz y democracia”, alertó Flores.
Con información de Latinus y La Crónica
MSA
