Desde que Armando Zazueta sustituyó a Carlos Lomelí como superdelagado de Jalisco muchas de sus acciones no fueron bien vistas por sus colaboradores; tan es así que lo denunciaron por uso electoral de Programas de Bienestar, nepotismo y operaciones políticas.
Fue a mediados de septiembre, cuando cuatro de los subdelegados regionales manifestaron su inconformidad con el trabajo de Zazueta y el 14 de noviembre pasado fueron despedidos.
A Olaf Guzmán Flores, quien se desempeñaba en Tequila; Blanca Olivia Vargas Mendoza, en Zapopan; Luis Armando Vargas Prado, de Mascota y, María de Jesús Padilla Romo, en Tepatitlán se les removió de su cargo sin aguinaldo ni finiquito.
Tal decisión se tomó tras una reunión en Guadalajara, ahí se les comunicó que su contrato había vencido y no se les podría renovar. Sin embargo, todavía faltaban 15 días para la conclusión del mismo.
Cabe señalar, que los cuatro funcionarios que removieron de su cargo remitieron una carta el 13 de septiembre de este año, señalando que Armando Zazueta elaboró una estructura con fines electorales, en consecuencia solicitaron una “investigación formal”.
Armando Zazueta es colaborador cercano del coordinador nacional de los superdelegados, Gabriel García, quien desde que tomó su cargo ha sido señalado por sus subordinados, a causa de los excesos en lo que incurrió.
Solo resta esperar si este caso quedará impune o será investigado por la Fiscalía Especializada en Atención de Delitos Electorales, tal y como lo dijo este martes el presidente Andrés Manuel López Obrador.
Con información de Proceso
