La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), invalidó el nombramiento de Julio César Jiménez Reyes como presidente del Tribunal Superior de Justicia de Chihuahua (TSJCH), al considerar ilegal la destitución de su antecesor Gabriel Sepùlveda.
Por medio de la controversia constitucional 150/2016, interpuesta por el magistrado Jorge Ramírez Alvídrez, no se contempla la restitución del destituido Gabriel Sepúlveda.
Esta controversia se debe a la reforma al Poder Judicial impulsada en 2016 por el gobernador Javier Corral, la cual vulneró los principios de división de poderes, independencia y autonomía judicial según indicaron los magistrados de la Suprema Corte.
“Esta Corte no puede avalar que se tomen medidas de este tipo, que lesionan gravemente la independencia del Poder Judicial”, manifestó el ministro Arturo Zaldívar.
Por ello el máximo tribunal del país determinó de forma unánime la destitución inmediata del actual magistrado presidente del Tribunal Superior de Justicia Chihuahua, para que sus integrantes puedan elegir libremente a un nuevo presidente.
Esto va a consistir en que el TSJCH va a elegir por mayoría de dos terceras partes al nuevo titular para un periodo de tres años.
Este es un revés para el gobernador, quien en público acusa del uso faccioso de las instituciones en contra de Ricardo Anaya, en el caso de la investigación por lavado de dinero que tiene la PGR en su contra.
En cambio, no hemos visto a nadie de “Por México al frente” pronunciarse en contra del actuar del gobernador de Chihuahua por imponer jueces a modo. ¿Dónde está la congruencia que tanto pregonan?
Al final con esta resolución se viene abajo el “magistrado carnal” de Javier Corral.
