Consulta popular en Jalisco ¿Pasos en la azotea de la 4T?

La primera jornada de la consulta popular que se realiza en Jalisco para preguntar a la población si está de acuerdo en que la entidad se salga del pacto fiscal tuvo mucha participación, lo cual debe tener preocupado a más de uno en el gobierno de la “4-T”.

Esta consulta es muy distinta a las que ha promovido el presidente Andrés Manuel López Obrador, pues la de Jalisco está organizada por el Instituto Electoral del estado y fue diseñada por profesionales en la materia.

El pasado domingo, primera de cuatro jornadas de recepción de opiniones, se vieron filas afuera de las mesas, lo cual augura que al final del ejercicio se logrará el mínimo de participación exigido por la ley para que la consulta sea vinculante.

Las tres restantes jornadas se llevarán a cabo en los próximos tres domingos, luego de lo cual el órgano electoral local hará la evaluación correspondiente y determinará si el resultado será vinculante o no.

El más feliz con esta consulta es el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, quien amparado en este ejercicio podría cumplir su amenaza de abandonar el pacto fiscal con la Federación.

Una medida de esta naturaleza le generaría al gobierno de López Obrador una gran crisis, no solo porque dejaría de recibir importantes recursos fiscales provenientes de Jalisco, sino por las implicaciones legales e institucionales del caso.

Al final de cuentas, la consulta popular podría obligar a López Obrador a hacer lo que no ha querido porque no le gusta: sentarse a negociar con los gobernadores de oposición.