El gobernador del estado de Chihuahua, Javier Corral destacó que la preocupación actual es la descoordinación con la Federación en cuanto a la seguridad, ya que es sólo un acto “vengativo” y reflejó un talante autoritario debido a la posición ante el tema del agua.
Durante su comparecencia en el Congreso del estado, el mandatario indicó que dicha acción rompe el pacto federal para tratar temas de interés público.
“La seguridad pública no puede, no debe ser condicionada ni rehén de disputas políticas o diferencias ideológicas”, señaló.
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Asimismo, añadió que la Federación militarizó el conflicto y dejó a la Guardia Nacional en las presas, ante ello rechazó que hubiera una “conspiración” por parte del gobierno de Chihuahua en las mesas de seguridad.
Finalmente destacó que se busca cumplir con el Tratado de Aguas de 1944 con Estados Unidos, sin afectar a los usuarios de riego de la zona centro sur del estado, a lo que el Gobierno de la República seleccionó como interlocutor al conflicto del agua al subsecretario de Seguridad Pública, Ricardo Mejía Berbeja.
AIS
