Ayer se dio a conocer a conocer que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) fue uno de los posibles blancos de espionaje del software de Pegasus, de la firma israelí NSO Group.
López Obrador y al menos 50 de sus cercanos, incluidos su esposa, hijos, hermanos y hasta su cardiólogo, fueron eventualmente seguidos entre 2016 y 2017, antes de que se realizara la elección presidencial en la cual resultó ganador, reportó el diario británico The Guardian.
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Durante la investigación se concluyó que los usuarios de NSO Group comúnmente enfocan los intentos de espionaje en redes de contactos, no solo en objetivos particulares.
Esto significa que los operadores del programa ubican y atacan al círculo de confianza del blanco principal; es decir los amigos, colaboradores cercanos y familiares de la víctima principal también se convierten en un target.
Uno de ellos, por parte de AMLO, fue su cardiólogo, Patricio Ortiz. El gobierno anterior buscó toda la información sobre la salud del presidente, de cuando sufrió los infartos y todo lo que tiene que ver con su corazón.
Durante las últimos días los periodistas participantes de Pegasus Project buscaron al especialista para conocer su postura ante estos hechos. Aseguró que nunca habló de la salud de AMLO por teléfono, por lo que no tuvieron más información de la que se sacó públicamente.
“No hablaba de la salud de López Obrador por teléfono para proteger la imagen del candidato, sabía que tenía que cuidar mucho la información que yo decía”, apuntó.
¿Sabrá Peña Nieto información delicada de AMLO que lo usó justo para que no lo toque? Si nos ponemos analizar, el único expresidente del que no habla es de él, ¿por qué? Usted Juzgue.
AIS
