Muchas ingenuas y muchos incautos aplauden que, en el gobierno por venir, por fin las mujeres ejercerán el poder.
Dicen que habrá una “señora presidenta”, tanto Palacio, como en el partido oficial, Morena.
“Viviremos lo impensable; las mujeres en los principales centros del poder político en México”, dicen algunas y algunos no sólo con una pesada estulticia, sino con una ingenuidad supina.
Sin embargo, y más allá de ingenuidades y estrategias “engañabobos”, lo cierto es que se trata del acomodo perfecto para mantener a los López en el centro del poder absoluto, durante todo el sexenio por venir.
Es decir, que tanto López Obrador como López Beltrán serán los verdaderos “mandones”, detrás de las faldas de la espuria Claudia Sheinbaum y de la “milusos” Luisa María alcalde.
Y es que también al mejor estilo lopista, hoy se confirma el uso y abuso de las mujeres en la política, por parte de los López; mujeres que han sido convertidas en marionetas de los varones titiriteros como AMLO.
Por cierto, una práctica que, a lo largo de la última década, vio nacer a decenas de “recaudadoras” a las que el poder pagó sus servicios con porciones de poder, tanto en Morena, como en el gobierno federal y, sin duda, en gobiernos estatales como los de México y Veracruz, entre muchos otros.
Y es que, para confirmar la hipótesis, no hace falta más que formular las preguntas concretas sobre el papel que jugarán en el próximo sexenio las señoras Sheinbaum y alcalde –entre muchas otras–, para entender que, de nuevo las mujeres en Morena y en la pandilla de AMLO, no son más que “sirvientas” del poder absoluto, detrás del trono, llamado López Obrador.
Y por eso el reto. Piensen la respuesta a las siguientes preguntas
¿Habrá alguna o algún ingenuos que creerán que López Obrador se refugiará en “La Chingada” sin meter mano detrás de la espuria Claudia?
¿De verdad creen que Obrador impuso a la espuria Claudia para que gobernara de manera independiente?
¿Habrá alguna o algún ingenuos que creerán que López Beltrán será el segundo o tercero en Morena?
¿En serio creen que “Andy” –el hijo de AMLO–, fue impuesto como secretario de Organización de Morena, para recibir órdenes de Luisa María alcalde, y que, sin más, Andy se plegará a las órdenes de Claudia?
Lo cierto es que estulticia e ingenuidad aparte, hoy queda más claro que nunca que no solo asistimos a la muerte de la democracia mexicana sino a la instauración de uno de los más potente y eficaces Maximato; el de López.
En efecto, resulta innegable que Obrador tuvo la habilidad de maniobrar para cometer el mayor fraude electoral de la historia, en la presidencial del 2024; para someter a los órganos electorales; para destruir la división de poderes y, sobre todo, para darle muerte a la democracia.
De esa manera, López impuso a la espuria Claudia, que no es más que una eficiente marioneta del “macho alfa” de la manada de Morena; quién a su vez resulta el verdadero mandamás: el jefe del clan y hasta el “el rey león”.
Pero López Obrador no deja cabos sueltos y, por tanto, colocó a su heredero, Andrés López Beltrán, motejado como Andy, como jefe político del partido y como gerente de los dineros del partido.
Y si tenían alguna duda, con un cinismo sin igual, Andy López Beltrán dijo que llegó a la secretaría de Organización de Morena, para cuidar el legado de su padre.
¿Y cómo debemos entender ese mensaje?
En realidad, resulta de párvulos.
¿Por qué?
Porque el mayor traficante de influencias y de recursos públicos durante el gobierno de López Obrador, su hijo Andy, confirmó que seguirá siendo el mayor traficante de influencias y de dinero, en la gestión de Claudia, a través del partido Morena.
En efecto, en el sexenio por venir, no sólo veremos más de lo mismo en cuanto al saqueo de dinero público y a los negocios familiares de los López Obrador, sino que continuarán la opacidad y la impunidad.
Y claro, la jugada resultará una apuesta “maestra”, ya que el gobierno de Claudia nunca perseguirá las raterías de su padre político, López Obrador, sino que seguirá solapando las raterías de la pandilla criminal de los López, a través del heredero de nombre Andy.
Por eso debemos insistir que el cuento de “las mujeres al poder”, no es más que otra de las patrañas de López Obrador para engañar a los idiotas y, sobre todo, para engatusar a las mujeres.
¿Lo dudan?
Al tiempo.