Tras la revelación de la millonaria fortuna en propiedades de la pareja Sandoval-Ackerman, por parte del equipo de Carlos Loret de Mola, la 4T en “bola” se lanzó contra el periodista y su equipo, siendo la mayor prueba de cinismo de quienes ahora pertenecen al gobierno.
Años atrás, durante el gobierno de Enrique Peña Nieto, y cuando Andrés Manuel López Obrador era dirigente de Morena, es decir, oposición, aplaudió y dio crédito absoluto de las revelaciones periodísticas sobre la compra de la “casa blanca” de Angélica Rivera, ex primera dama, y de una residencia en un fraccionamiento exclusivo de Malinalco, Estado de México, del entonces secretario de Hacienda, Luis Videgaray.
En ese entonces, de acuerdo con el medio Etcétera, López Obrador, a través de un video en redes sociales, acusó que la casas de Angélica Rivera y de Videgaray, no habían sido compradas sino que eran producto de “sobornos” de Higa al gobierno de Peña Nieto.
“Hay pruebas suficientes para sostener que lo de las casas pues no fueron adquisiciones. No es que hayan comprado las casas Peña, su esposa, Videgaray. Son sobornos. Como se dice coloquialmente, moches”, dijo. No obstante, las pruebas, nunca fueron mostradas.
Asimismo, a través de un tuit, Obrador lamentaba que a pesar de las casas de Peña y Videgaray, hubiera gente que apoyara al “régimen corrupto”.
A pesar de las casas de EPN y Videgaray, y de la exoneración de Raúl Salinas, muchos siguen apoyando al régimen corrupto. ¿A qué se debe?
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) December 17, 2014
Por otra parte, los ahora involucrados, Irma Eréndira Sandoval y su esposo, John Ackerman, quienes en ese entonces eran académicos de la UNAM y militantes de Morena, también criticaron, cuestionaron y exigieron rendición y declaración de bienes tanto de los funcionarios públicos como de su familia y parientes cercanos.
Por su parte, según Etcétera, Sandoval escribió el 13 de diciembre en su cuenta de Twitter: “A propósito de la casa blanca de Videgaray, va mi artículo sobre conflicto de interés disponible en mi blog personal #YaMeCansé4”; dicho artículo remite a un texto de su autoría publicado en 2011 en la Revista Técnica, donde cuestiona los vacíos legales que dan pie a que las declaraciones patrimoniales de los servidores no contengan toda la información que deberían, cita ejemplos de otros países, donde sugiere que no sólo los funcionarios públicos rindan su declaración de bienes sino también sus cónyuges y otros parientes cercanos. No obstante, dicho tuit al parecer ha sido borrado.
En cuanto a su esposo, Ackerman, también publicó un tuit el 12 de diciembre de 2014 donde cuestionaba la legalidad de la casa de Videgaray. Un día después en otro mensaje, anunció una propuesta para evitar los conflictos de interés en los funcionarios públicos, en donde hizo un particular énfasis en el hecho de que algunos de los funcionarios refirieran que algunos de sus bienes los habían recibido “en donación”, así como ahora ellos lo han declarado.
Otro caso parecido sucedió cuando el 11 de abril de 2015, el semanario Proceso divulgó un reportaje en donde se denunciaba que el entonces secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, había comprado una residencia con un valor actualizado de 50 millones de pesos en las Lomas de Chapultepec.
Aunque hay gente honrada en Las Lomas, viviendo EPN, Chong, Miranda y otros, hasta dan ganas de poner allí el aviso: "Cuidado aquí roban"
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) April 13, 2015
Ya basta de mentiras. Funcionario que no transparente TODOS sus intereses y propiedades debe renunciar: http://t.co/8jzV9ZGBxi #OsorioChong
— John M. Ackerman (@JohnMAckerman) April 13, 2015
¿Así o más cinismo? Pues como oposición la 4T aplaudió revelaciones periodísticas pero hoy ataca y amenaza a la prensa por un reportaje donde ahora ellos son los acusados, donde ahora ellos son a los que se les cuestiona y los señalados. ¿Por qué antes sí la prensa tenía razón y ahora no y son llamados “sicarios mediáticos”?
Con información de Etcétera