Con el grito “ ¡Basta ya!, de la migra deportar”, la caravana de migrantes hondureños logró cruzar a México de manera ilegal por Guatemala.
Ante la situación las autoridades federales no pudieron hacer nada más que tratar de impedirles el paso. Sin embargo las vallas no fueron suficientes para contener las multitudes de salvadoreños, hondureños y guatemaltecos.
Por su parte, desde el día de ayer la Comisión Nacional de Derechos Humanos, le pidió al gobierno de México que manifestara una postura ante los hechos.
Twiit:
La #CNDH intensificó sus actividades en favor de las personas en contexto de #Migración en la zona fronteriza sur del país ??, en el estado de Chiapas, y en especial de quienes integran la “Caminata Migrante” que inició en Honduras y tiene como destino los #EUA ??.
— CNDH en México (@CNDH) 19 de octubre de 2018
“Se les escapó la gallina de los huevos de oro”
Para los traficantes de humanos que obtienen sumas millonarias anualmente, el hecho representó un pérdida para su negocio redondo ya que cobran entre seis mil 500 a siete mil dólares por “trasladar” a los migrantes desde Ciudad Hidalgo hasta alguna ciudad de la frontera con Estados Unidos.
Al cruzar en unión todos los migrantes, evitaron hacer éste pago que les otorgaría un permiso del Instituto Nacional de Migración para establecerse legalmente en México, como lo afirmó el padre Flor María Rigoni, premio nacional de derechos humanos.
Por otra parte, en respuesta a la CNDH, en México, el canciller Luis Videgaray solicitó la intervención de la ONU para atender a la Caravana Migrante a través de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) y así buscar no violar sus derechos fundamentales. Resta esperar la reacción del presidente Donald Trump luego de que amenazó de cerrar la frontera norte con México, si éste dejaba pasar a los hondureños.
