¿Austeridad? Congreso de CDMX reparte a diputados bono de 40 mil pesos

Pese que la coordinadora de Morena en el Congreso de la CDMX, Ernestina Godoy, aseguró hace un par de semanas que los asambleístas “se amarrarían” el cinturón en concordancia con lo dictado por el presidente electo Andrés Manuel López Obrador, hace unos días entregó a cada uno de sus 34 compañeros de bancada un cheque por 40 mil pesos como supuesto bono de productividad.

Godoy afirmó apenas el 6 de octubre que se tomarían medidas drásticas en el Congreso capitalino, como recortar viajes al extranjero, bonos por productividad e incluso, mejorar la percepción que tiene la ciudadanía sobre los legisladores

De acuerdo a la columna en tiempo real El Caballito, publicada en El Universal, los diputados de oposición están más que molestos con la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso local ante sus mentiras.

Resulta que, tras la entrega del citado bono de “productividad” a sus compañeros morenistas, doña Ernestina Godoy respondió a los serios cuestionamientos del dispendio, asegurando que “había sido un error”, por lo que los legisladores de inmediato pensaron que el dinero sería devuelto.

Sin embargo, el desencanto, sorpresa y enojo llegó cuando Godoy dijo que tal apoyo sería para los 66 diputados locales.

Una mentira más que evidencia que los discursos de austeridad republicana son demagogia pura y los beneficios serán para la mayoría que le corresponde a Morena en cada recinto legislativo, como en San Lázaro o en el Senado, sin mencionar los congresos estatales.

Por cierto que, a finales de septiembre, Ernestina Godoy no solamente se “agandalló” con la oposición, sino con sus propios diputados de bancada, pues con el respaldo del vicecoordinador de Morena, Eduardo Santillán, ese grupo se quedó con las mejores comisiones y hasta pretenden tirarles línea.

Pero lo que más indigna a los diputados morenos es que en campaña salieron a la calle prometiendo la reducción de mil 300 millones de pesos al presupuesto del ahora Congreso y resulta que doña Ernestina quiere que la tijera sea de 800 millones.

¿Será que ya le vio el gusto a los beneficios de ser legisladora en la capital del país?

¿Y el plan de austeridad en el senado?