AMLO y Espriú se creen ingenieros aeronáuticos; desestiman estudio de MITRE

El riesgo latente de colisión que se vive en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) ya no permite perder el tiempo para buscar nuevas alternativas que resuelvan su saturación como lo pretende Andrés Manuel López Obrador.

Sin embargo, tanto para el futuro titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), Javier Jiménez Espriú y como para el tabasqueño, sí es viable el proyecto de las dos pistas en la base de Santa Lucía. Ello a pesar de que la firma argentina Mitre sostiene que tendrían que disminuirse la frecuencia de llegadas y salidas.

Así lo señaló el propio Jiménez Espriú al término de la reunión que sostuvo el presidente electo con el gobernador electo de Tabasco, Adán Augusto López: “Nosotros no estamos de acuerdo con los peros de Mitre”, subrayó, aunque reiteró que se analizan los estudios de la empresa.

En entrevista, señaló que disminuir la frecuencia de vuelos no conviene porque de lo que se trata es de hacer más eficiente el servicio aeroportuario. Declaró que la opinión de los ingenieros mexicanos sobre el dictamen del Nuevo Aeropuerto de la Ciudad de México (NAIM) se entregará al equipo del presidente electo de México el próximo 5 de septiembre.

MITRE, a través de su director, Bernard Lisker ha declarado hasta el cansancio que la ampliación de la base de Santa Lucía y su operación simultánea con el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) generaría riesgos para el tráfico aéreo y retrasos en ambas instalaciones por la interferencia de rutas.

A esta situación de alerta, se le suma otro factor de riesgo, que es la decisión del AICM de operar sus pistas casi de forma simultánea, es decir, que al tiempo que aterriza un avión, otro despega.

El problema con esta forma de operar, es que, en caso de que un avión que va aterrizar decida regresar al aire, éste va a encontrarse con el avión que va despegando, porque en el AICM hay una sola salida, y por eso el riesgo de colisión es alto.

De acuerdo con estudios de tráfico aéreo que se hicieron años atrás, así como de institutos de investigación en la materia como MITRE, se determinó que tras una serie de cambios, el AICM podría incrementar su capacidad 2 por ciento. Así se decidió hacer la terminal 2 y un rodaje paralelo.

Por lo que la construcción del NAICM en Texcoco “es nuestra recomendación definitiva”, ha señalado MITRE en varias ocasiones.

Pese a lo anterior, el Presidente electo desestima los estudios y hará una consulta pública para determinar si se cancela el nuevo aeropuerto y se construyan dos pistas en el aeropuerto militar de Santa Lucía para que opere simultáneamente con el AICM.