AMLO se olvidó de la infraestructura. Hace unos días el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) le cambió el nombre a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) para incluir la palabra “Infraestructura”. Pero paradójicamente, ese es uno de los pies de los que cojea la “Cuarta Transformación”.
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Como ejemplo, vale destacar que de acuerdo con datos del Tercer Informe de Gobierno, se han construido 127 kilómetros de carreteras por año; lo que representa menos del 10 por ciento de los mil 509 kilómetros que se construyeron durante el sexenio de Enrique Peña Nieto.
Lo que ha construido en carreteras el gobierno de López Obrador se vuelve ridículo al compararlo con los tres mil 624 kilómetros construidos por año durante el sexenio de Felipe Calderón, es decir, 28 veces más que lo hecho por la 4T.
AMLO se olvidó de la infraestructura
En realidad, a López Obrador no le interesa la infraestructura. En lo que va de su Gobierno le ha destinado apenas el 18 por ciento del presupuesto a este rubro; mientras el sexenio anterior la cifra llegó al 24 por ciento y en el de Calderón cerca del 30 por ciento.
El desdén presupuestal se refleja en la falta de mantenimiento a carreteras, puentes, terminales terrestres y aéreas; y a lenta construcción de caminos nuevos, pero también en la falta de hospitales.
¿No que no protegería a nadie?https://t.co/rQgpGYop3Y
— Ricardo Alemán (@RicardoAlemanMx) October 6, 2021
No por nada México perdió la confianza global para invertir durante el gobierno de López Obrador; ya que en el Índice de Confianza de la Inversión Extranjera Directa publicado por la consultora AT Kearney, pasó del lugar 17 al 25, es decir, al último lugar de los países evaluados.
El nuevo nombre de la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) quedó muy bien. Lástima que haya una gran incongruencia entre el nombre y la realidad.
JC
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