En una de sus tantas entrevistas como presidente electo Andrés Manuel López Obrador sostuvo que al inicio de su gobierno acabaría la violencia e inseguridad en el país; incluso lo reafirmó aquel 1 de diciembre de 2018 en la plaza de la Constitución.
Sin embargo, a más de 10 meses del comienzo de la “Cuarta Transformación” México no se logra pacificar, pues con base en información del sitio Contrapeso Ciudadano hasta este 16 de octubre se contabilizan 30 mil 315 asesinatos, una cifra inédita.
Con ese dato se puede constatar que AMLO no ha podido cumplir la promesa de bajar los altos índices de violencia que aquejan a la nación; al grado de que el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo, recientemente reconoció que de de un día para otro estas problemáticas sociales no se van a resolver.
“(La inseguridad) es un problema viejo. En primer lugar, tenemos que combatir eficazmente la corrupción en los cuerpos de seguridad. Número dos: estamos atendiendo las causas sociales que generan la inseguridad. No podemos desestimarlas. Por eso hablamos de que la política social del gobierno va en paralelo, generando oportunidades de educación. […] No hay solución de un día para otro para la inseguridad. Sería irresponsable plantearlo de otra manera”, enfatizó Durazo Montaño, durante la mañanera del 15 de octubre.
Aunado a lo anterior, en lo que va de esta administración se han suscitado varias masacres —Minatitlán, Uruapan, Coatzacoalcos, Aguililla, Iguala, etcétera– que han cobrado las vidas, tanto de civiles como de elementos de seguridad; lo que denota que la Guardia Nacional tampoco está siendo la solución que tanto se vislumbro.
Con información de Radio Fórmula.
