De acuerdo con datos del Banco de México (Banxico), en el 2019, los mexicanos con activos financieros fuera del país duplicaron sus depósitos en instituciones extranjeras, pasando de 8 mil 132 millones de dólares a 16 mil 10 millones.
En el reporte de la balanza de pagos de 2019 se señala que tan sólo en el cuarto trimestre de ese año salieron del país 2 mil 514 millones de dólares frente a los 733 millones de igual periodo de 2018, según reportó el El Universal.
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¿Qué quiere decir esto? Tras el triunfo del actual mandatario Andrés Manuel López Obrador, no se ha observado ningún retorno de capitales, como sucedió entre julio y septiembre de 2018.
Pretenderá el gobierno extender la recaudación entre los grandes contribuyentes, pero nada logrará si continúa tirando dinero en proyectos no productivos, o en programas sociales por los que no se pagan impuestos.
Sin incentivos para el sector privado, como hasta ahora, mover sus capitales fuera de México será la disyuntiva, continuando con la fuga de capitales que se vive desde 2018.
A pesar de que el mandatario tiene “buena” relación con inversionistas nacionales, eso no le asegura que un crecimiento económico, ya que los grandes capitales buscan cobijarse en activos seguros.
No obstante, las empresas mexicanas en el extranjero aumentaron sus inversiones, lo que refleja que los nacionales ven un mejor panorama allá afuera.
Con información del diario El Universal
