Ahora resulta que a la CNTE le importa la educación

Este fin de semana, la Sección 22 de la CNTE en Oaxaca acordó la reapertura de las escuelas que se mantenían cerradas a causa de sus protestas en contra de la Reforma Educativa.

De acuerdo con voceros de la Coordinadora, en los próximos días sostendrán reuniones con padres de familia para acordar un calendario escolar—a conveniencia— e iniciar clases a partir de este miércoles 7 de Septiembre.

De acuerdo con el propio magisterio, con estas medidas se pretende mostrar el “compromiso” de la CNTE con la educación de la niñez, además de corresponder al “respaldo de los padres de familia”.

Pero, ¿Qué hay detrás del giro estratégico y discursivo de la CNTE? ¿De verdad responde a una preocupación genuina con la niñez y su educación? ¿O finalmente entendió el magisterio que estaba estirando demasiado la liga en su relación conflictiva con los padres de familia y la sociedad oaxaqueña?

Aunque la CNTE se empeña en afirmar que su regreso a las aulas tiene como fin  “demostrar que su proyecto tiene que aterrizar en la práctica”, la decisión  de la Coordinadora se enmarca en una situación de descontento social. Y es que desde hace dos semanas, padres de familia y pobladores en varios municipios de Oaxaca expresaron su inconformidad con los actos vandálicos del magisterio y exigieron que se respete el derecho a la educación de sus hijos; por lo que en algunos puntos estatales se recurrió a la fuerza para recuperar escuelas tomadas.

Al respecto, algunos se preguntan ¿A qué “respaldo” de los padres de familia se refiere la Coordinadora?

A pesar de que los voceros de la CNTE califiquen estas acciones como un “reacomodo” en su estrategia y se nieguen a reconocer que se trata de un “repliegue”, hay quienes piensan que con esto, la Coordinadora claudica en su reivindicación de no regresar a clases hasta que se derogue la Reforma Educativa. Por el contrario, con su regreso a las aulas cumplen una de las condiciones puestas por el Gobierno para que se retome el diálogo.

Y es que como parte de su replanteamiento táctico, la CNTE ahora se dice dispuesta a negociar bajo las condiciones marcadas por el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; un diálogo público y abierto a la sociedad.

Si bien los maestros regresan a las aulas, trabajadores administrativos adheridos a la CNTE mantendrán un debilitado paro en el centro de Oaxaca y reforzarán las movilizaciones en la Ciudad de México. Además, afirman que “expulsarán” de las escuelas a aquellos maestros que no apoyaron sus protestas o dieron clases durante el paro, y también impedirán el ingreso a docentes designados por el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO).

Asimismo, en Chiapas el posicionamiento del magisterio es mantener los bloqueos a plazas comerciales hasta que se derogue la Reforma Educativa.