Este domingo, el periódico Reforma publicó una encuesta que ubica a Andrés Manuel López Obrador como el segundo lugar en la preferencia de los ciudadanos de cara a las elecciones presidenciales de 2018. De acuerdo con la publicación, la panista Margarita Zavala se ubica en primer lugar con un 26 por ciento de las preferencias —dos puntos porcentuales por encima del líder de Morena, quien tiene 24 por ciento—.
Si bien López Obrador ya mandó “al diablo las instituciones”, en esta ocasión no aceptó los resultados del sondeo de Reforma, ahora “mandó al diablo” a la encuesta. El presidente de Morena comparó a Reforma con el periódico El Imparcial—que en tiempos de Porfirio Díaz golpeaba a los opositores—.
Por su lado, Martí Batres —líder del partido en la Ciudad de México— afirmó que la encuesta de Reforma es un intento por posicionar a Zavala de cara a 2018 y sentenció: “identidad ideológica mata objetividad periodística”.
Para algunos está claro que para López Obrador y para Morena, el segundo lugar en una encuesta no es “aceptable”, pero cuando el mismo periódico publicó —apenas en abril— una encuesta en la que el tabasqueño aparecía en primer lugar, la “respuesta” si era aceptable. En su momento, el señor López Obrador celebró el resultado y afirmó que se trataba de una muestra de la confianza de la ciudadanía en su partido.
Entonces, ¿Cómo calificar la actitud de López Obrador? Aquí 10 adjetivos que podrían definir la personalidad del líder de Morena, en torno a la encuesta del Reforma:
- Contradictorio: Persona que se contradice cuando dos de sus afirmaciones son opuestas y una desmiente a la otra. Es una contradicción que López Obrador haya dado crédito a Reforma tras la encuesta de abril, que lo ubicó como puntero de las preferencias, pero que ahora haya descalificado al medio cuando el resultado no le favoreció.
- Evasivo: Persona que elude las dificultades. López Obrador, quien cada vez que es cuestionado, culpa de todo a la “mafia del poder” y sus “complots”.
- Intolerante: Persona que no respeta las ideas, creencias o prácticas de los demás cuando son diferentes o contrarias a las propias.
- Necio: Persona terca, que se aferra a sus ideas y— aunque esté equivocado—, no reconoce los argumentos de otros.
- Mesiánico: Persona que se ve a sí mismo como “el salvador”, como un agente bienhechor y tiene una confianza desmedida en su propia persona.
- Autoritario: Persona que considera que todos los demás —actores políticos e instituciones— deben someterse a su voluntad.
- Mitómano: Persona que recurre sistemáticamente a la mentira.
- Opaco: Persona que carece de transparencia. Su declaración 3 de 3 ocultó datos como ingresos por regalías de libros, conferencias y donativos, así como sus gastos en giras por el país y la forma en que las costea.
- Obstinado: Persona que se aferra a una idea sin tomar en cuenta otras posibilidades. El tabasqueño se aferra a la idea de alcanzar la presidencia y no contempla posibilidad alguna de ser derrotado
Hipócrita: Persona que finge sentimientos o cualidades contrarios a los que realmente tiene. Por ejemplo, a pesar de todos los objetivos arriba mencionados, López Obrador dice que establecerá una “república amorosa”.
