A cinco años, aquí cinco cosas que no conocías del caso Ayotzinapa 

A cinco años de la desaparición de 43 estudiantes de la escuela Normal Rural ‘Isidro Burgos’, de Ayotzinapa, los familiares de las víctimas siguen sin conocer la verdad de los hechos, y tras casi un año de mandato, el compromiso de esclarecer el caso por parte de Andrés Manuel López Obrador, sigue sin mostrar avances en la investigación. 

Bajo una versión oficial del Gobierno del expresidente Enrique Peña Nieto más desacreditada de nunca, la liberación de decenas de presuntos responsables, y el reto de comenzar desde cero, hay diversos aspectos que casi no se han difundido, y el Diario Contrapeso Ciudadano comparte cinco de ellos. 

Estudiante militar

Uno de los jóvenes desaparecidos es Julio César López Patolzin, quien tiempo después se supo que un militar activo con permiso para estudiar y se encargaba de informar al Ejército.

A través de un video, el periodista Humberto Padgett confirmó que el joven normalista mandaba información sobre las actividades dentro de la escuela a la Mesa de Inteligencia del Batallón 50 asentado en Chilpancingo. 

En la grabación, con fecha del 29 de septiembre de 2014, aparece el Coronel de Infantería diplomado del Estado Mayor, Gregorio Espinoza Toledo, junto con la madre del desaparecido, donde se alcanza a oír: “Julio César era un buen informante”. 

Eran más de 43

De acuerdo a un expediente judicial del cártel Guerreros Unidos (GU) que operaban en Chicago, relacionado con la autoría material de la desaparición de los normalistas, la cifra de desaparecidos era superior a 50 personas. 

La carpeta recoge conversaciones que confirman que la noche del 26 de septiembre del 2014, GU también se enfrentó a un grupo de seis integrantes de Los Rojos (LR), un grupo rival. 

Cabe recordar que una e las líneas de investigación del caso Iguala, se enfoca en que GU atacó a los normalistas por confusión: pues pensaron que eran integrantes de LR que pretendían quitarles la plaza de Iguala. 

El patrón: autor intelectual

El pasado 17 de septiembre, Ángel Aguirre Rivero, ex gobernador de Guerrero, reveló durante una junta con la Comisión Presidencial para la Verdad y con padres de los desaparecidos, que había que ahonda en la figura de El Patrón, el probable autor intelectual del ataque y desaparición de los jóvenes. 

No obstante, ésta no fue la única ocasión que se nombró a este personaje, pues en la investigación que realizó la extinta Procuraduría General de la República (PGR), en diversas ocasiones se mencionó. Asimismo la CNDH, recopiló testimonios de gente que estuvo presente o relacionada con el caso y también fue mencionado. 

Participar en la marcha del 2 de octubre en la CDMX

El motivo del viaje de los estudiantes aquel 26 de septiembre  a Iguala, fue para “secuestrar” camiones y así poder viajar a la Ciudad de México y participar en la marcha del 2 de octubre.

Cabe señalar, que esta acción (de robar camiones), se realiza en casi todas las Normales del país en vísperas de la manifestación en conmemoración de la matanza del 2 de octubre, sin embargo, nunca imaginaron que terminaría en una tragedia. 

Tepecoacuilco, la nueva pista

Tepecoacuilco es el sitio en que varios elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), por señalamiento de la Fiscalía General de la República (FGR), ya realizan trabajos de investigación.

La CNDH señala que los 43 estudiantes probablemente fueron entregados a El Patrón en el municipio de Huitzuco. Tepecoacuilco se ubica en la ruta que va de Iguala al pueblo donde se encontraba el presunto autor intelectual.

Con información del Diario Contrapeso Ciudadano.