Activistas de Tijuana denunciaron que agentes de la Guardia Nacional (GN) y del Instituto Nacional de Migración (INM), intimidaron a un grupo de migrantes en el albergue fronterizo Bordeline Crisis Center, el cual únicamente acoge a mujeres, madres y niños migrantes.
Judith Cabrera, codirectora de dicho albergue informó que los hechos se suscitaron el pasado 11 de octubre, alrededor de la 01:00 horas, cuando varios agentes de la Guardia Nacional y del INM ingresaron al albergue con violencia.
De acuerdo a los testimonios de los migrantes, los agentes irrumpieron el lugar con gritos y patadas, amenazando a las mujeres y menores de edad que se encontraban en el lugar, pues se les acusó de esconder personas ilegales para ayudarlas a cruzar a Estados Unidos.
Activistas denunciaron que estos hechos violan la Ley de Migración, además de que vulneraron a las personas que se encontraban en el albergue, quienes eran mujeres y niños, los cuales vienen escapando de entornos de violencia en sus lugares de origen.
Se señaló que los agentes violaron el artículo 76 de dicha ley, el cual señala que el INM “no podrá realizar visitas de verificación migratoria en los lugares donde se encuentre migrantes albergados por organizaciones de la sociedad civil o personas que realicen actos humanitarios, de asistencia o de protección a los migrantes”.
Las encargadas del albergue aseguran que las cámaras de seguridad captaron la llegada de estos agentes, quienes además fueron reconocidos gracias a los uniformes que portaban. Se destacó que estos hombres no mostraron orden judicial.
“En ese momento se encontraban un total de 30 mujeres y niños de distintas nacionalidades, sin ninguna otra defensa contra las armas largas de los agentes, que el teléfono para hacer una llamada, entre ellas había familias monoparentales, lesbomaternales, mujeres lesbianas y trans, además de mujeres negras, todos estos grupos frecuentemente discriminados y atacados por militares y policías”, informaron los activistas.
Las encargadas del albergue y las activistas que denunciaron el caso, piden que las autoridades investiguen lo sucedido, esclareciendo quien dio la orden para irrumpir en este espacio. Piden también que se castigue a los responsables y que se garantice la seguridad de las personas migrantes en el país.
Ante la denuncia, el INM negó que sus agentes intentaran entrar de manera ilegal a dicho albergue y argumentaron que como no recibieron respuesta desde que llegaron, los agentes decidieron retirarse del lugar, a pesar de que en las grabaciones se ve otra cosa.