¿AMLO y el PRI se alían contra Anaya?

Panistas y algunos intelectuales han hecho eco de información que supone una alianza entre el PRI y López Obrador para descalificar a Ricardo Anaya en la contienda electoral de este 2018.

La información tuvo su origen en la cúpula panista. El presidente nacional del blanquiazul, Damián Zepeda y el líder senatorial del PAN, Fernando Herrera, fueron los primeros en insinuar un acercamiento entre el AMLO y el PRI para —juntos— exponer a Anaya por su presunta implicación en lavado de dinero.

“Parece que han entrado en maridaje el PRI y el viejo PRI. El PRI y Morena han hecho una alianza que podemos denominar Primor. Son un primor”, declaró a la prensa el legislador a principios de mes.

Los rumores fueron secundados pocos días después por articulistas que tienen espacios en un medio de circulación nacional, como lo es Milenio.

El intelectual Héctor Aguilar Camín, describió en su columna de este martes —titulada “¿Fin del PRIAN?”— una supuesta ruptura entre el PRI y el PAN, que se habría dado a raíz de las amenazas de Anaya de llevar a juicio a Peña Nieto.

El historiador afirmó en sus líneas que el “PRIAN”, después de casi doce años en alianza contra AMLO se habría divorciado y ahora Peña Nieto “tendería puentes” con López Obrador en búsqueda de “inmunidad”.

Aguilar Camín también fue uno de los firmantes en la carta dirigida al presidente Peña Nieto, en la que se le denuncia por “el uso del Ministerio Público federal para perjudicar al candidato presidencial del Frente Por México, Ricardo Anaya”. ¿Casualidad?

También el misterioso columnista Gil Gamés, salió en defensa de Ricardo Anaya y escribió acerca de la hipotética “muerte” del “PRIAN” y el nacimiento de la alianza entre el “viejo PRI” (representado por AMLO) y el nuevo PRI, encabezado por Peña Nieto.

Los textos de ambos columnistas fueron publicados este martes 6 de marzo, hecho que podría levantar sospechas sobre una posible consigna desde el PAN para tratar de limpiar el apellido Anaya.

Además, el uno y el otro centran su discurso en las deficiencias entre AMLO y el PRI como para descalificarlos y, en el mejor de los casos, rebajarlos al nivel de Anaya.

Y tampoco plantean la probabilidad (que es mucho más alta) de que el tricolor ataque a Anaya Cortés con la estrategia de desbancarlo del segundo puesto en las encuestas y buscar competir directo contra el morenista. En cambio, reproducen el discurso forjado desde la cúpula panista para descalificar los escándalos patrimoniales de Anaya.