Una de las primeras acciones que hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador al tomar posesión del cargo, fue apoderarse del control del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
El asalto al máximo tribunal electoral del país se dio de manera paulatina y empezó desde la etapa de transición, cuando en los hechos López Obrador ya tomaba muchas decisiones.
En noviembre del 2018, cercanos a López Obrador operaron para que el TEPJF anulara las elecciones de gobernador de Puebla, que había ganado por escaso margen la panista Martha Erika Alonso, esposa del senador Rafael Moreno Valle.
El instrumento para tratar de lograr su objetivo fue precisamente el magistrado José Luis Vargas, quien el 2 de diciembre del 2018 –un día después de la toma de posesión de López Obrador– hizo público su proyecto de sentencia en la que proponía –con argumentos endebles— la anulación de las elecciones de Puebla.
Pero el proyecto enfrentó la oposición de cuatro de los siete magistrados, entre ellos la entonces presidenta del TEPJF, Janine Otálora, quien aportó su voto de calidad para que el proyecto fuera rechazado en el pleno y se confirmara así el triunfo de Martha Erika Alonso.
El presidente de la República no le perdonó esa afrenta a Janine y, con José Luis Vargas nuevamente como instrumento, presionó de manera pública y privada a la presidenta del Tribunal, hasta que la orilló a renunciar al cargo, lo que ocurrió el 23 de enero del 2019.
Como presidente sustituto fue nombrado Felipe Alfredo Fuentes Barrera, uno de los tres magistrados que sí se habían alineado con el obradorismo y que habían respaldado con su voto el proyecto de anular las elecciones de Puebla.
Se habla de que entre los conspiradores contra Janine había un acuerdo en el sentido de que Fuentes Barrera sería reelecto al terminar su mandato, en noviembre del 2020, pero José Luis Vargas lo desconoció y, con el apoyo del consejero jurídico de la Presidencia, Julio Scherer, operó para hacerse nombrar presidente del Tribunal.
Unos días antes de ser electo presidente con una apretada mayoría de cuatro contra tres, José Luis Vargas le hizo otro favor al presidente López Obrador y a Morena, al promover la negativa del registro a México Libre, el partido que intentaba crear el ex presidente Felipe Calderón.
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La gestión de Vargas es una historia de desencuentros entre él y una mayoría “opositora” compuesta por cinco magistrados, entre ellos Janine Otálora y quien la sucedió en la presidencia, Felipe Fuentes Barrera.
La liga se estiró tanto que el pasado miércoles reventó. Esa mayoría de cinco decidió destituir a Vargas como presidente del Tribunal y nombrar en su lugar a Reyes Rodríguez Mondragón, quien no goza ni de la cercanía ni de las simpatías del inquilino de Palacio.
López obrador perdió el control del TEPJF en momentos en los que este órgano debe resolver diversas impugnaciones a los resultados de las elecciones del pasado 6 de junio, entre ellas las que se refieren a la elección de gobernador en Guerrero, Campeche, Michoacán y San Luis Potosí.
Vargas, el ariete del obradorismo, deja la Presidencia del TEPJF de una manera nada decorosa, aferrado a la silla y en medio de acusaciones de lavado de dinero y enriquecimiento ilícito por parte de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda.
OFF THE RECORD
**ACAPULCAZOS DE LA “4-T”
En lo que va del gobierno de la autodenominada “Cuarta Transformación” los precios de las casetas de cobro de la Autopista del Sol se han incrementado en cinco ocasiones.
La más reciente, que entró en vigor el pasado 1 de agosto, se decretó en plena temporada alta y tomó por sorpresa a miles de paseantes que se encontraban en el puerto y tuvieron que pagar más por regresar a la Ciudad de México.
**A REPARAR BACHES
Ahora, el presidente López Obrador se dedicará a reparar baches.
Desde su óptica de jefe de Estado, los baches son el principal problema de la ciudadanía, por encima de la inseguridad, la falta de medicamentos y el incremento en los precios de los productos básicos.
Seguramente el presidente cree que todo México es Macuspana.
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