Las razones que explicarían por qué Moreira está en prisión

Como seguramente sabe, el ex gobernador de Coahuila, Humberto Moreira, vive un complicado proceso penal en los tribunales de España.

Y aunque el político ya recuperó su libertad, lo cierto es que no termina de quedar claro qué hay detrás de su detención.

En La Otra Opinión creemos que podría haber tres explicaciones.

La primera la compartió a este espacio el Maestro Jorge Lara –ex subprocurador Jurídico de la PGR–; según el experto, las figuras públicas son “fichadas” por las autoridades extranjeras.

En la jerga del derecho internacional existe una figura llamada “PEP” es decir, Persona Políticamente Expuesta. ¿Y qué implica entrar en esta categoría?

Simple, que los gobiernos extranjeros vigilan con lupa las transacciones de estos individuos. En consecuencia, no debería extrañar que Moreira cayera en manos de la justicia extranjera por una falla que, para algunos, se antoja menor.

Pero hay más, la segunda explicación es la versión oficial. En otras palabras, que como se dice, Humberto Moreira tiene cuentas pendientes en España, en Estados Unidos y probablemente en otros países.

O si lo prefiere, que simple y sencillamente llegó el momento de que Moreira pague las facturas pendientes.

No obstante, existe una tercera opción.

Existen antecedentes que podrían explicar la rudeza innecesaria del gobierno de España contra el priista Humberto Moreira.

En 2005, el entonces jefe de gobierno del Distrito Federal –Andrés Manuel López Obrador–, acusó a la española EUMEX de no respetar las leyes mexicanas y de intentar amenazar a su gobierno.

Según se sabe, la empresa firmó un contrato para instalar mobiliario urbano en el Distrito Federal en los tiempos del regente Óscar Espinoza Villarreal.

No obstante, irónicamente, Obrador los acusó de no pagar las tarifas de energía eléctrica y trató de rescindir el contrato.

Cuando la española trató de defenderse, el gobierno capitalino mandó a la cárcel al presidente de Eumex, Antonio Torres; y a su representante legal, Eduardo Macía.

Con el tiempo se acusó a López Obrador de intentar quitar el contrato a Eumex para dárselo a alguien más.

Una historia similar ocurrió con el grupo PRISA, el grupo líder en medios de comunicación de habla hispana.

PRISA, que actualmente edita en México una versión del Diario español El País, era la más adelantada en la carrera por la tercera cadena de televisión abierta.

Los españoles mantenían una relación laboral con el empresario Anuar Maccise, muy cercano al círculo presidencial.

No obstante, el escándalo de la Casa Blanca –que involucró a los Maccise–, frustró el acuerdo y dejó a PRISA fuera de la carrera.

No sobra decir que PRISA había adquirido propiedades, maquinaria y personal para operar la cadena.

Finalmente, la española OHL también ha estado envuelta en escándalos de tráfico de influencias y corrupción.

Como sabe, una serie de escuchas ilegales habrían destapado una red de tráfico de influencias entre la empresa y autoridades estatales.

Lo cual ocasionó el despido de funcionarios de alto nivel.

Por eso preguntamos, ¿cuál de las tres opciones explica la ofensiva contra Humberto Moreira? ¿Será que la rudeza en el caso Moreira es una de cal por las que van de arena?