La tarde del martes, Samuel Rodríguez Moreno –sobrino de Fernando Moreno Peña, ex gobernador de Colima–, fue acribillado a las afueras de un negocio de llantas localizado en la capital del estado. Según se sabe, tres personas abordo de un vehículo rompieron fuego en contra de Rodríguez.
A propósito, no está de más aclarar que Samuel Rodríguez Moreno fue señalado –por la Procuraduría General de Justicia del Estado–, como presunto responsable de la ejecución de otro ex gobernador de Colima, Silverio Cavazos Ceballos, quien fue muerto en 2010.
Además, es importante recordar que a mediados de octubre, el propio Fernando Moreno Peña –ex gobernador–, fue víctima de un atentado que lo tuvo entre la vida y la muerte.
Y para rematar, tampoco sobra decir que Colima se encuentra en medio de la elección extraordinaria de gobernador. Y es que, a raíz de una serie de irregularidades, el Tribunal Electoral decidió invalidar los resultados de la elección del pasado 5 de junio. En consecuencia, fue necesario reponer el proceso.
En este contexto, Colima regresa al ojo del huracán. A días de la elección extraordinaria, en Colima se encuentran las balas y los votos.
En medio de una feroz guerra sucia en contra del candidato del PAN –Jorge Luis Preciado–, en Colima también se libra una guerra con tintes de venganza política.
Y es que, por un lado, el PRI y el PAN disputan los votos de los colimenses. Pero por otro lado, las viejas rencillas pasan factura a la familia del ex gobernador Fernando Moreno. ¿De qué tamaño será la deuda de Fernando Moreno y sus cercanos? ¿qué tan grande será la factura que arrastra el clan del ex gobernador?
Ante este escenario, la pregunta obligada es, ¿qué guerra es más peligrosa para los colimenses? ¿la guerra sucia contra el panista? ¿la guerra por los votos? ¿o será, acaso, la guerra de las venganzas políticas?
Lo único cierto es que los ataques en contra de Fernando Moreno y su parentela dejan ver que en Colima vive –y sobrevive–, uno de los rostros más añejos, deshonestos, violentos y amenazantes del PRI, ¿es ése el partido que hoy pide los votos de la ciudadanía? ¿es ése el PRI que quiere seguir gobernando el estado? ¿es ése el partido por el votarán los colimenses?
Por lo pronto, vale la pena retomar un poco la vida de Samuel Rodríguez Moreno, quien fue señalado en diversas ocasiones por mantener un supuesto vínculo entre el narco y la política colimense.
El 15 de diciembre de 2011, el fallecido Rodríguez tramitó un amparo con el que evitó ir a prisión luego de que Pedro Tirado Barajas, alias “El Pecas”, detenido implicado en el asesinato de Cavazos Ceballos, asegurara recibir órdenes, por medio de Samuel, de Gerardo Mendoza Chávez, líder del Cártel de Colima y presunto autor intelectual del crimen.
Por otro lado, cabe señalar que el sobrino muerto del ex mandatario Fernando Moreno era abogado de Mendoza Chávez, lo cual en vida nunca negó.
A su vez, en el mismo año, 2011, el entonces gobernador Mario Anguiano aseveró contar con documentos que revelan la cercanía de Ramírez Moreno con Mendoza Chávez, los cuales no se hicieron públicos en ningún momento.
El caso desapareció del ojo mediático; sin embargo, para el 29 de mayo de 2013 se dio a conocer la detención de Samuel Rodríguez, aunque del tema no se supo más.
Sobra señalar que dos meses antes de la aprehensión de Rodríguez Moreno, Yolanda Verduzco Guzmán, quien fuera la procuradora encargada del asunto y la responsable de los señalamientos al sobrino del ex gobernador Fernando Moreno, fue destituida del cargo por el mandatario Mario Anguiano, y el 27 de mayo de 2013 ocupó un puesto de menor relevancia en el Instituto de la Mujer de la entidad. ¿Casualidad?
Para 2014, con un nuevo procurador a cargo del órgano de Justicia de Colima, se descartó que el móvil del asesinato de Cavazos fuera de índole político y gracias a las declaraciones del titular el la PGJE, Humberto Vuelvas Aguilar, se supo que la línea de investigación que implicaba a Samuel Rodríguez había quedado descartada desde tiempo atrás, y de este modo nos enteramos que el acusado ya estaba en libertad.
Por último, sobresale que Samuel no es el primer pariente de Fernando Moreno Peña asesinado, y es que a principios de 2015, Carlos Amador Moreno, también sobrino del ex gobernador, fue ultimado mientras transitaba en un vehículo particular por la avenida Enrique Corona Morfín.
