Video: ¿Cuántos se han subido a un avión? Noroña intenta humillar a la gente

El diputado federal por el PT, Gerardo Fernández Noroña en campaña de convencimiento para que la gente voté en contra del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM) en Texcoco, terminó siendo una burla para los presentes.

En el momento en que el político solicitaba a la gente sufragar por la Base Aérea Militar de Santa Lucía en la próxima consulta popular propuesta por Andrés Manuel López Obrador, Noroña lanzó un cuestionamiento:

– ¿Cuántos se han subido a un avión aquí? Alce la mano quien se ha subido.

– ¡Invítenos!

– ¡Ay, cabrón! Aquí sí hay varios… pero al pinche “restaurán” que está ahí parado, que haya volado la chingadera. De todos modos, la mayoría de la gente jamás se ha subido a un avión.

Al diputado le salió el tiro por la culata. En primer lugar, de manera descarada se burló de los presentes a quienes consideró no aptos siquiera para votar en la consulta del presidente electo. Sin mencionar que hizo caso omiso cuando le gritaron: “invítenos”. Bien sabe Noroña, como hemos documentado en este espacio, que el señor navega con bandera socialista, pero vuela en clase VIP.

Y finalmente, pese a la insistencia de que “todo es negativo” en cuanto al NAICM, sería bueno que Gerardo Fernández Noroña –quien dice no ser un funcionario público sino diputado federal (¿?)– explicarle los beneficios económicos al país a través de una sede de negocios necesaria como sería el aeropuerto.

  1. – El NAICM arrancaría operaciones con una capacidad de 60 millones de pasajeros, la cual podría crecer hasta llegar a los 125 millones.
  2. – En el aspecto turístico, el aeropuerto es la primera presentación de un país para un viajero; en la experiencia del pasajero cuenta no solo la imagen, sino la calidad de servicio y el trato que recibe.
  3. – El aeropuerto tendría para transformar el lugar donde será construido, por medio de las nuevas áreas de desarrollo y oportunidades de empleo.
  4. – La Base Militar de Santa Lucía y la operación simultánea con el actual aeropuerto es un riesgo latente para el tráfico aéreo y habría que retrasar vuelos.